El subsecretario de Urbanismo nuevejuliense, Martín Banchero, destacó que el evento meteorológico “provocó un desastre que es mayor del que imaginábamos”, pero además la región continúa en alerta naranja y “otro temporal ahora, aunque el viento sea la mitad de violento, causaría otra catástrofe”.
El temporal que azotó la tarde del martes a la ciudad de 9 de Julio dejó al menos 40 casas sin techo, unas 80 familias afectadas y unas 40.000 hectáreas de sembrados afectadas. El secretario de Urbanismo de la localidad, Martín Banchero, afirmó que el desastre, causado por vientos de 130 kilómetros por hora, “es más grande de lo que imaginábamos, afectó a más zonas de las que se vieron al principio. 9 de Julio no está preparado para un evento así”.
Banchero contó en comunicación con DIB que comenzaron a realizar relevamientos para cuantificar los daños en las construcciones. “Desde el Comité de Crisis de la Municipalidad se está triangulando con Defensa Civil, Bomberos, Seguridad y otras áreas. En cada área uno le pide ayuda a sus conocidos. Soy también dirigente del Colegio de Arquitectos y convoqué a mis colegas de 9 de Julio. Esta mañana pensé que iban a venir 5 o 6 y éramos cerca de 30 arquitectos, la mitad de los que hay en la ciudad. Salimos en grupos de dos arquitectos con dos asistentes sociales, comandados por Desarrollo Comunitario, y estamos haciendo un relevamiento de la zona que habíamos visto afectada. Cuando empezamos a recorrer, vimos que la zona es más grande de lo que imaginábamos, más de lo que habíamos podido observar. Ahora estamos comenzando a digitalizar la información”.
Banchero comentó que “esta tarde se espera una tormenta parecida a la de ayer, así que si se puede con un nuevo relevamiento y si no, esperaremos que pase la tormenta. La idea es digitalizar todo para tener cuantificado qué tipo de material se necesita y qué nivel de urgencia. Hay gente que se le cayó la casa, más de 40 casas que se le voló el techo, hay gente que se le derrumbó la casa directamente y después, bueno, gente que el techo no se levantó pero que le rompió las aberturas y que le destruyó todo dentro de la casa”.
El funcionario destacó que “9 de Julio no está preparado para un evento con viento de 130 kilómetros por hora. Hay una fábrica con más de 60 años que quedó con el techo destrozado. Hay cuadras enteras arrasadas. Hoy, cuando empezamos, pasamos por un barrio que no teníamos anotado como de catástrofe, y encontré una familia sacando el techo de la casa. Pero era de dos casas al lado, o sea, el techo se le había volado y había caído dos casas arriba del techo de un vecino.”
El partido sigue “en alerta naranja”. El secretario de Urbanismo nuevejuliense señaló que “creemos poco probable que vuelva a pasar un evento como el de ayer, pero con un viento de la mitad, los daños serían iguales a lo de ayer, porque hay techos que ya están arrancados, hay plantas que están a punto de caer, y el piso está más blando. Así que ese con un viento significativamente menor que el de ayer, pero fuerte, sería catastrófico también”.
Banchero cerró: “Estamos trabajando a destajo, Bomberos, Policía, Defensa Civil, nosotros los arquitectos, cada quien en lo suyo”.
Zona de guerra
En tanto, el subsecretario municipal de Seguridad, Fabián Beltrán, indicó en declaraciones a Radio Provincia que hubo barrios donde el 80 por ciento de las casas tuvieron “pérdidas insalvables”: “Parecía una zona de guerra, que afectó a unas 80 familias de la ciudad. Ver el sufrimiento de la gente de perder en minutos el esfuerzo de años de trabajos es devastador”.
El funcionario destacó que en la zona de campos “de acuerdo con los primeros relevamientos, hubo entre 30 y 40 mil hectáreas afectadas con sembrados de soja y girasol”.
Y señaló que “estuvimos trabajando desde el primer momento con el Comité de Crisis desde el municipio con otros organismos y ni bien finalizó el evento realizamos un análisis sobre los lesionados que fueron trasladados al hospital con heridas leves. Luego se atendió a las personas desamparadas, a los evacuados que fueron 6 o 7 familias y ayer se les dio la cena, hoy desayuno y viandas para almuerzo, merienda y cena”.
Por otra parte la Municipalidad de 9 de Julio informó este miércoles, en un comunicado, que “que el Parque General San Martín permanecerá cerrado temporalmente, con el fin de resguardar la integridad de los ciudadanos, mientras personal del área realizará en los próximos días tareas de reacondicionamiento”.
Evacuados
Anoche mismo el Comité de Crisis municipal, encabezado por la intendenta María José Gentile, dio una conferencia de prensa en la que se indicó que seis familias habían sido alojadas en la Sociedad Rural, a lo que se sumaron otras autoevacuadas.
La jefa comunal, acompañada por la secretaria de Desarrollo Comunitario, María Márquez; el subsecretario de Seguridad, Fabián Beltrán, y el jefe de Bomberos Voluntarios, Sergio Fernández, expresó que “el fenómeno climático que se abatió sobre nuestra ciudad luego de las 14 y que se extendió por aproximadamente 15 a 20 minutos dejó una afectación muy importante en las zonas norte y oeste de la ciudad, como así también en la zona rural, con algunas consecuencias también en las localidades de Naón y Fauzón, y pérdidas realmente millonarias para familias e instituciones como el Aero Club o el Auto Moto Club Nuevejuliense, entre tantas otras”.
“De inmediato pusimos en marcha este Comité de Crisis, junto a las fuerzas que lo integran, realizando un relevamiento de la situación a fin de brindar asistencia a quienes lo necesitaran, sabiendo que existían barrios muy afectados, como la zona del ex Matadero y el Carmelo”, señaló Gentile.
Por su parte el jefe de Bomberos, Sergio Fernández, indicó que inicialmente se dio prioridad a la atención de las familias que sufrieron la voladura de techos en sus hogares y caída de árboles sobre viviendas, donde podía haber riesgo para personas. “Movilizamos a todo el Cuartel y a otros destacamentos de la zona, y afortunadamente pudimos ir cubriendo todas las emergencias”, remarcó. (DIB) MM