El acusado de triple homicidio hizo llegar un mensaje a la comunidad nicoleña. Fue mediante un breve video registrado en la UP3, donde Grottini permanece detenido desde el 8 de junio. Aseveró su inocencia y cargó contra “mentiras” que atribuyó a la fiscal Baños, a cargo de la investigación por la cual el juez Prati ya dictó la prisión preventiva para el acusado.
De la redacción de EL NORTE
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Lo mismo que en cada instancia de la instrucción en que se le requirió su expresión al respecto, Pablo Damián Grottini volvió a clamar su inocencia. Se trata del hombre de 42 años, habitante de Villa General Savio en el Partido de Ramallo, acusado de matar a su hermano Germán (32) en 2019, a su hija adoptiva Ailén (10) en 2021 y a su madre Teresita Di Martino (61). La última de las muertes se produjo unos días antes de su arresto, a fines de abril pasado.
El imputado estuvo detenido en la Comisaría Segunda de Ramallo hasta el 8 de junio. Ese día, con dictamen de prisión preventiva ya firme en su contra, fue trasladado a la Unidad Penal 3 de San Nicolás. Allí Grottini grabó un video al que accedió Diario EL NORTE.
“Soy Pablo Damián Grottini. Estoy acusado por haber matado a mi familia, algo en lo cual no tengo nada que ver. Soy inocente”, expresa el acusado en el breve registro audiovisual, de una extensión de 34 segundos. Con lágrimas en los ojos, con una barba de días, usando la misma campera del día de su traslado al penal y con una pared descascarada como fondo, Grottini volvió a declararse inocente: esta vez no ya ante la Justicia, sino de cara a la opinión pública.
El detenido se refirió en el video a las “mentiras” de la fiscal María Belén Baños, titular de la UFI N°12 de San Nicolás a cargo de la instrucción. “La señora fiscal, a partir del 28 de abril de 2022, me culpa de ser un asesino serial. Ella dijo que no tenía dudas, aún cuando las cuatro pericias del cuerpo de mi madre salieron bien. Nadie me escucha a mí ni a mis defensores”, clamó Grottini, quien hasta su detención se desempeñaba laboralmente en una funeraria de San Nicolás.
Sobre la instrucción de Baños, amplió: “La señora dijo que yo había cremado a mi hija y había tirado las cenizas de mi hermano al río, lo cual es mentira. Son todas mentiras, soy inocente”.
Antes de salir del plano, volvió a insistir todavía una vez más: “Soy inocente”.
La hipótesis
La investigación apunta a que Grottini planificó los tres crímenes, con búsquedas de Internet sobre cómo causar la muerte con diversos métodos, algo que surgió en las pericias a sus dispositivos.
En su historial online figuraba que buscó “cómo provocar un infarto”, “qué pasa si se inyecta aire en las venas”, “cuánto después de introducir aire se produce el infarto”, “los 10 venenos más letales” y otras averiguaciones similares.
El propio acusado confirmó esas búsquedas, pero aseguró que las realizó con intención de suicidarse y no con el objetivo de matar a otras personas.
Mientras se investigaba este episodio, diferentes testimonios de allegados revelaron que un hermano de Grottini había fallecido en circunstancias similares, al igual que su hija de 10 años, quien padecía un retraso madurativo. Las sospechas se acrecentaron porque ninguno de los familiares tenía una patología previa. Germán, por ejemplo, era deportista y guardavidas. Su madre, según dichos de sus amigos, días antes de ser internada estaba en perfecto estado de salud. Lo mismo Ailén.
