Más de 30 personas resultaron heridas y debieron ser atendidas por cortes en manos y pies. El caso más grave fue el de una adolescente de 13 años a la que tuvieron que amputarle un dedo: fue sometida a un injerto en el quinto metatarsiano en el Hospital de Niños Doctor Orlando Alassia.
Los bañistas afectados fueron mordidos ayer por estos peces en los balnearios de la laguna Setúbal, en la costanera Este de la capital santafesina. Aprovechando el feriado por el Día de la Soberanía Nacional y en medio de una jornada de calor agobiante, muchos decidieron acudir a las playas de la ciudad y algunos se animaron a un chapuzón sin imaginarse de la presencia de estos peces, que se ve favorecida por las temperaturas sofocantes y el agua tibia, además de las bajantes.
Las palometas guardan similitudes con las pirañas, se trasladan en cardúmenes y prefieren las zonas de aguas bajas para alimentarse. Se trata de un pez grande y muy voraz que tiene dientes muy afilados con un gran poder de corte.
Si bien existen muchas especies, las que aparecen en Santa Fe suelen ser las pilopleura, conocidas como piraña, palometa brava o palometa brillante; y las nattereri, llamadas palometas mora o palometas pacusa.