Tras la finalización del programa Precios Justos, los frigoríficos acercaron al Gobierno una propuesta para garantizar el abastecimiento a valores accesibles hasta fin de mes.
El equipo de gobierno de Javier Milei, con Luis Caputo a la cabeza del Palacio de Hacienda, llegó para poner fin a muchas de las políticas implementadas por el kirchnerismo en los últimos cuatro años, sobre todo en materia económica.
Durante la primera semana de gobierno, el flamante ministro de Economía presentó un “Plan de Emergencia Económica” que incluye medidas que pretenden lograr la reducción del déficit fiscal, el sinceramiento de tarifas y la corrección monetaria.
Tras la finalización del programa Precios Justos, las empresas de consumo masivo aumentaron fuertemente sus precios para intentar recomponer sus márgenes de rentabilidad que venían atrasados. Antes, también habían finalizado los Precios Justos de la Carne, con sus siete cortes a precios económicos.
Pero la aceleración de la inflación, potenciada por la devaluación de más del 50%, hizo que el Gobierno dialogue con los privados la posibilidad de hacer acuerdos voluntarios en algunos productos; por ejemplo, en la carne, un alimento muy consumido por los argentinos que en lo que va de diciembre sufrió un aumento de más del 40% en el Mercado de Cañuelas y el precio de venta al público de la carne vacuna subió en el AMBA más de 30% en ese mismo período.
Para este mes, las estimaciones indican que la inflación sería superior al 20%, lo que haría que 2023 termine con un valor acumulado cercano al 200%.
La propuesta que le acercó el consorcio de exportadores de carne ABC al Gobierno incluye la posibilidad de colocar una gran cantidad de volumen de cinco cortes a precios fijos en los supermercados, con precios 40% inferiores que los que se encuentran actualmente en las carnicerías, donde el kilo cuesta entre $6.000 y $7.000. El objetivo de esta medida, es garantizar el abastecimiento para las fiestas de fin de año a precios accesibles.
Los cortes, que comenzarán a venderse desde la semana próxima en algunas cadenas de supermercados, son los siguientes: matambre ($5.900); vacío ($5.900); asado ($4.900); tapa de asado ($4.900) y falda ($2.900), con un adicional del 6% para la región patagónica.
Estos precios se encuentran hoy en los supermercados, pero desde el consorcio ABC remarcan que los precios actuales “no reflejan todos los aumentos de la última semana”, dando a entender que, sin este acuerdo, subirían bastante más en los próximos días. “Los precios acordados pueden ser parecidos a los que se observan hoy en algunas cadenas, pero tener cantidades a esos precios no es menor; además, son 40% más bajos que los de las carnicerías”, remarcó un ejecutivo de un importante frigorífico.
Hasta el momento, los supermercados que aceptaron la propuesta con Carrefour, Changomás y Cencosud. La Anónima y Coto la rechazaron porque ellos mismos son productores de carne.
“Nos sirve porque nos asegura volumen y calidad a un precio contenido. Mantiene un buen diferencial entre canales y al Gobierno le sirve porque le pone un ancla al canal tradicional, es decir, a las carnicerías”, aseguraron en una cadena, que recibiría por semana casi el doble de carne de lo que tenía durante el acuerdo pasado de los siete cortes.
A partir de ahora, la Secretaría de Comercio, a cargo de Pablo Lavigne, analizará los convenios que ofrezcan los privados. “No serán planes del Gobierno, sino propuestas voluntarias. Nosotros ayudamos a armarla”, aclararon fuentes de la secretaría.
Según el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de noviembre, la suba de alimentos y bebidas fue el 15,7%, por encima del nivel general (12,8%). En detalle, los cortes de carne en el GBA treparon entre 12% el kilo de cuadril y 16,8% el kilo de asado. Estos precios ya quedaron desactualizados debido a los fuertes aumentos de diciembre, que todavía no concluyeron.