Juan Bautista De Benedictis, con una buena dosis de fortuna y una alta cuota de perseverancia, se adjudicó el triunfo en la primera carrera de la temporada de Turismo Carretera, llevada a cabo en el autódromo de Viedma.
Juan Bautista De Benedictis, con una buena dosis de fortuna y una alta cuota de perseverancia, se adjudicó el triunfo en la primera carrera de la temporada de Turismo Carretera, llevada a cabo en el autódromo de Viedma.
“Me costó mucho volver a este lugar, a lo más alto del podio, pero hice mucho para estar. El de arriba vio que me lo merecía”, manifestó después de la carrera el conductor del Ford #157, quien había conseguido su cuarta y última victoria en la categoría el 14 de abril de 2013, en el autódromo “Ciudad de San Martín”, en Mendoza.
Agustín Canapino, en su debut en el equipo JP Carrera y bajo la conducción deportiva de Guillermo Ortelli, partió desde la posición de privilegio tras imponerse en la serie más veloz de la mañana y tuvo que defender cuatro veces el liderazgo.
La primera fue en la largada ante Juan Pablo Gianini y la segunda, con nueve vueltas cumplidas, después de la primera neutralización y nuevamente ante ese piloto saltense. En ambas ocasiones, el ganador fue el piloto de Arrecifes.
Poco después, el Ford de Gianini presentó problemas de temperatura y tuvo que pasar por boxes, resignando cualquier posibilidad de pelear por la victoria hasta el final.
Canapino tuvo otros desafíos en la segunda mitad de la competencia. Transcurridas 16 vueltas, debió combatir con De Benedictis después de la segunda neutralización y nuevamente resultó victorioso, situación que lo envalentonó hasta el punto que prometió quedarse con el triunfo “en memoria de su padre”, tal como expresó por la radio a los integrantes de su equipo.
Sin embargo, poco después, por la misma vía, también advirtió sobre un problema con el consumo eléctrico de su Chevrolet y aparecieron los fantasmas de los momentos previos a la carrera, cuando presentó inconvenientes para encender su vehículo.
El fuerte golpe de Canapino
Una nueva neutralización terminó de complicarle la carrera. Sabiendo de los problemas que tenía el líder porque le habían avisado por radio, De Benedictis atacó sin contemplaciones en el relanzamiento e incluso llegó a superar la línea de Canapino. Pero la maniobra no dejó un buen saldo.
El necochense salió de pista en el marco de la refriega y perdió la chance de tomar la delantera, aunque la peor parte se la llevó el Titán de Arrecifes, cuyo auto quedó cruzado, con la mitad de la trompa sobre la pista, y recibió un fuerte golpe de parte de Jonatan Castellano.