Un hombre de 25 años ha sido acusado por su expareja de abusar sexualmente de su hija desde que tenía 8 años, ahora tiene 13, después de vivir juntos durante unos seis años.
El acusado negó las acusaciones y afirmó que no tenía nada que ver con ello. Se puso en contacto con el semanario La Opinión de San Pedro después de ver publicaciones en las redes sociales, especialmente en grupos de compra y venta, donde se mencionaban las acusaciones.
La investigación está en curso, y el caso está siendo tratado por la Fiscalía Nº 5. Ya se han realizado evaluaciones médicas preliminares, y el siguiente paso es programar evaluaciones psicológicas de la presunta víctima utilizando el sistema de cámara Gesell.
La expareja del acusado también lo denunció previamente por violencia de género. El acusado fue detenido brevemente, pero fue liberado después de reunir testigos para demostrar su inocencia.
A pesar de las llamadas en los grupos de compra y venta buscando información sobre el acusado, actualmente no hay orden de arresto para él. El sistema de justicia está esperando la recolección de pruebas esenciales, incluyendo el testimonio de la presunta víctima a través del sistema de cámara Gesell, antes de tomar cualquier decisión sobre el acusado.
Este caso destaca la importancia de abordar las acusaciones de abuso a través del sistema legal y la necesidad de recopilar pruebas sólidas antes de sacar conclusiones.