Santiago Passaglia es el primer precandidato a diputado provincial de una de las listas de Juntos. Naldo Brunelli encabeza una nómina del Frente de Todos. En las PASO el primero tendrá que superar su interna. Del otro lado, el camino de Brunelli hacia noviembre parece allanado. Más allá de cuál termine siendo la lista más votada, ambos tienen prácticamente su lugar asegurado en la Legislatura provincial.
De la redacción de EL NORTE
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A través de las Elecciones Legislativas 2021, la Segunda Sección Electoral de la provincia de Buenos Aires designará 11 representantes para la Cámara de Diputados bonaerense. En esa senda –y hacia las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) del 12 de septiembre próximo– al menos diez alianzas y sectores políticos presentaron sus listas de precandidatos. La novedad más saliente del cierre de listas tuvo que ver con los primeros lugares que ocupan los nicoleños Santiago Passaglia y Naldo Brunelli en sus nóminas de Juntos y el Frente de Todos, respectivamente. Dos nombres de peso, un duelo mano a mano –internas mediante– y dos bancas prácticamente aseguradas para dos nicoleños en la Cámara Baja provincial a partir del 10 de diciembre próximo y hasta fines de 2025.
Por el lado de Juntos (línea Pro), el nicoleño Santiago Passaglia vuelve a encabezar la lista en la sección. Es actual miembro de la Cámara Baja bonaerense, donde preside la comisión de Asuntos Cooperativos y Vivienda, con mandato que expira en diciembre próximo.
El segundo lugar es para la concejala pergaminenense María Paula Bustos y el tercero está ocupado por el actual diputado Matías Ranzini, zarateño. El cuarto lugar es para la exintendenta de Baradero, Fernanda Antonijevic. Y quinto aparece otro nicoleño: Ignacio Mateucci, exsecretario de Gobierno del municipio y también presidente del Concejo Deliberante entre febrero y diciembre de 2017.
En el Frente de Todos el número uno seccional de la lista más alineada con la Gobernación fue para el histórico metalúrgico Naldo Brunelli, secretario administrativo de UOMRA y secretario general de la Seccional San Nicolás del gremio. Segunda terminó apareciendo la diputada camporista Fernanda Díaz (oriunda de Colón), que va por la renovación. El tercer escalón es para el jefe comunal de San Andrés de Giles, el massista Carlos Puglielli. El cuarto puesto es de Lucía Klug y el quinto para Cecilio Salazar, intendente de San Pedro.
Internas previas
Aunque Passaglia y Brunelli encabezan sus nóminas, para llegar a competir mano a mano en noviembre el primero deberá sortear primero los escenarios de interna que las PASO les plantean.
Por el lado de Juntos, la línea Pro de Passaglia tendrá contienda interna con la línea UCR, que en la Segunda Sección Electoral tiene una lista encabezada por el intendente de Rojas, Claudio Rossi. En esa nómina hay otro nicoleño: Julio Pasqualin, presidente del bloque de concejales de Juntos por el Cambio.
En la vereda de enfrente, la lista “disidente” del Frente de Todos en la Segunda es la que inscribió el zarateño Sergio Berni, ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, con él mismo a la cabeza. De todas maneras, la junta partidaria les trasladó ayer a los apoderados de la lista una serie de “observaciones” que, de no ser subsanadas, dejarán a la nómina fuera de carrera hacia las PASO.
¿El escenario de internas podría atentar contra las aspiraciones de Passaglia y de Brunelli? Sí. Pero no. Aun instalados en hipotéticos escenarios de derrota en sus respectivas internas, tanto uno como otro seguirán contando con altísimas posibilidades de acceder a los escaños en diciembre, tras la elección decisiva del 14 de noviembre.
Se debe a que las minorías –es decir, las listas menos votadas en el marco de cada interna– tienen derecho a “colar” sus precandidatos en la lista de candidatos que competirá en noviembre. Según el caudal de votos logrado, la minoría puede acceder a ocupar el segundo lugar de la lista ganadora, en el mejor de los casos; o el quinto, en el peor. Siendo ambos cabezas de lista, esos espacios serían para Passaglia y para Brunelli, en caso de no ganar sus respectivas internas. Con 11 bancas en juego y una polarización que se anticipa muy fuerte en todos los niveles, los pronósticos más pesimistas tanto de uno como de otro lado dan cuenta de un mínimo de 5 bancas a lograr.