Donald Trump firmó una orden ejecutiva que retira a Estados Unidos de la Organización Mundial de la Salud. La medida, que corta el financiamiento estadounidense a la agencia, generó fuertes críticas.
El presidente Donald Trump ha firmado una orden ejecutiva para retirar a Estados Unidos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). La medida, anunciada en su primer día de su segundo mandato, busca cortar todo financiamiento, apoyo y recursos estadounidenses a la agencia sanitaria de la ONU. Esta decisión revive una promesa de su primer mandato y pone en jaque programas cruciales para la salud global.
Un golpe financiero y político
Estados Unidos ha sido históricamente el mayor contribuyente financiero de la OMS, aportando el 18 % de su presupuesto en 2022-2023, equivalentes a 1.284 millones de dólares. Sin embargo, Trump argumentó que la organización exige pagos desproporcionados y acusa a la OMS de estar influenciada por China, especialmente durante la gestión de la pandemia de COVID-19.
“La salida de Estados Unidos representa un duro golpe para la salud mundial y la capacidad de la OMS para cumplir su mandato”, señalaron expertos en salud pública. La decisión afecta directamente programas vitales contra enfermedades como la tuberculosis, el VIH y emergencias sanitarias en países en desarrollo.
Polarización y críticas
En el ámbito interno, la decisión ha polarizado al país. Mientras los partidarios de Trump ven la medida como una corrección de injusticias financieras, los críticos la califican de “irresponsable” y “catastrófica”. Lawrence Gostin, profesor de Derecho en salud pública, calificó la retirada como “una herida profunda para la salud pública global y para Estados Unidos”.
Repercusiones internacionales
La comunidad internacional ha expresado su preocupación ante la salida de Estados Unidos. La Unión Europea, junto con otros líderes globales, enfatizó la importancia de la OMS como un actor esencial en la protección de la salud mundial. El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, pidió reconsiderar esta decisión, advirtiendo sobre los riesgos de descoordinación ante emergencias sanitarias.
Retos sanitarios inmediatos
Esta decisión llega en un contexto crítico, ya que Estados Unidos lidera los casos mundiales de gripe aviar (H5N1). En 2024, el país reportó 66 de los 81 casos humanos registrados a nivel global, la cifra más alta desde 2015. La OMS advirtió que cada transmisión animal es una oportunidad para mutaciones peligrosas del virus.
La decisión de Trump subraya una tendencia hacia el aislacionismo, pero plantea interrogantes sobre el futuro de la cooperación global en salud. El mundo observa atentamente cómo se desarrollarán las políticas sanitarias y su impacto en los retos globales venideros.
