Con aumento, AMBA pagará boletos que irán de $25 a $32, mientras en
San Nicolás cuesta entre $67 y $111.
De la redacción de EL NORTE
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Dos mundos totalmente distintos. Un mismo servicio. El sistema de transporte público por automotor de pasajeros en sus variantes urbana y suburbana sigue dando muestras de una inequidad palmaria entre el AMBA, con una superficie de 13.285 kilómetros cuadrados, y el resto del país: es decir, los restantes 2,8 millones de kilómetros cuadrados que componen el suelo nacional.
Una nueva muestra de ello, contundente, se produjo esta semana. Con un lockout patronal que durante 48 horas redujo al 50% la frecuencia de sus servicios, las empresas que prestan el servicio en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y los distritos del conurbano bonaerense lograron una autorización de nuevas tarifas.
Las subas, del orden del 40%, se aplicarán a partir del 1º de agosto próximo. Aun con esos incrementos, los usuarios pagarán boletos de entre $25,25 y $32,20: es decir, mucho menos de la mitad de lo que se paga en San Nicolás, donde los viajes más cortos tienen desde marzo pasado un valor de $67. Y donde, además, aún está pendiente de resolución en el Concejo Deliberante un pedido de actualización tarifaria elevado hace ya dos meses por la empresa Vercelli Hnos.
Acá y allá
En el área del AMBA, hacia donde el Estado nacional volcó en 2021 el 80% de los subsidios al servicio, el pasaje más barato con hasta 3 kilómetros de recorrido pasará a costar $25,25 a partir de agosto. Los pasajes para recorrer entre 3 y 6 kilómetros tendrán un valor de $28; para los viajes de entre 6 y 12 kilómetros, $29,40; entre 12 y 27 kilómetros, $30,80; y los recorridos de más de 27 kilómetros tendrán un valor de $32,20.
Es decir que mientras un usuario de San Nicolás gasta $67 pesos para llegar desde barrio Alto Verde hasta el centro, completando un recorrido de apenas 2 kilómetros, un habitante del AMBA paga menos de la mitad para hacer un viaje de 30 kilómetros.
Ni hablar de la diferencia, en contante y sonante, si el usuario nicoleño necesita trasladarse a Conesa. Por ese traslado de 36 kilómetros, paga hoy $111 pesos: paga un 245% más de lo que abona un pasajero en el AMBA para hacer la misma distancia ($32,20).
El pasaje a La Emilia (14 kilómetros desde el centro de San Nicolás) cuesta hoy $70,50. Por esa distancia un pasajero del AMBA paga $30,80: un 56% menos.
Y así en todas y cada una de las tarifas: los $70,50 que se pagan para ir a Campo Salles, los $86 que cuesta el pasaje a General Rojo y los $111 que cuesta el boleto para llegar a Erézcano. La inequidad es patente: en la asignación de recursos y, por lo tanto, también en las tarifas.
Naturalmente, no ocurre solo en San Nicolás, sino en todo el interior del país. Algunos ejemplos: la tarifa plana cuesta $57,80 en Paraná, Entre Ríos (con tarifas diferenciadas de $46 entre las 8:30 y las 11:30 y $75 en horario nocturno); en la ciudad de Córdoba cuesta $69,50 (con una variante nocturna de $79,92); en Santa Fe, capital, y también en Rosario cuesta $69,50; en Neuquén $61,20; en San Salvador de Jujuy, $53,44.
Recursos desiguales
El aumento del transporte público que el Gobierno anunció para el AMBA no cambia el hecho de que todavía es más caro viajar en colectivo en el interior de la Argentina de lo que es hacerlo entre la Ciudad y el Gran Buenos Aires. Los precios de los colectivos en el interior superan a los del AMBA nominalmente, debido a la disparidad en los subsidios que recibe el sector.
Según estimaciones de la consultora Politikon Chaco, en 2021 las compañías de transporte público que operan en el AMBA recibieron $96.215,2 millones en concepto de subsidios, lo que representó el 77,9% del total entregado a nivel nacional.
En un intento por revertir esa tendencia, el Ministerio de Transporte dispuso un aumento del 10% en los subsidios a los colectivos de las provincias para julio, agosto y septiembre y un 16,9% adicional para octubre.
Esto se hizo a partir de una inversión de $16.050 millones para el cuatrimestre julio-octubre correspondiente al Fondo de Compensación al Transporte Público de pasajeros por automotor urbano y suburbano del interior del país.
Con este pago, las compensaciones al transporte de pasajeros fuera del AMBA alcanzarán $36.150 millones en los primeros diez meses de 2022. En comparación, en todo 2021 el monto de subsidios al autotransporte público de pasajeros en las provincias fue de $28.000 millones, lo que representa un incremento del 17,8%.
De todas maneras, aun con esta redistribución y el nuevo pasaje mínimo en el AMBA a $25,20, la diferencia todavía es de más del doble con algunas de las capitales provinciales más pobladas del país, en las que los boletos tienen un impacto mayor en el bolsillo de los usuarios.