La suba afecta los consumidores que pagan solo el mínimo de cada resumen.
Como parte del paquete con el que el Banco Central llevó la tasa de referencia del mercado de 38 al 40%, también subieron los recargos que cobran las tarjetas de crédito. Ahora la tasa para los que solo pagan el mínimo del resumen pasará de 43 a 49%.
La semana pasada el Central reacomodó la tasa de las Leliq. La subió dos puntos porcentuales para que no quedara tan retrasada respecto de la inflación y así darle algún tipo de atractivo a las colocaciones en pesos. Y de paso, la autoridad monetaria buscó alinearse con uno de los pedidos del Fondo Monetario, en medio de unas negociaciones que ahora están empantanadas.
Junto con esta actualización se tocaron las tasas de las tarjetas de crédito, que pasan de 43 a 49%. Se trata de la tasa de revolving, que se aplica sobre los saldos impagos de quienes abonan solo el monto mínimo.
Esa tasa cubre montos de hasta $ 200.000 y más allá de ese volumen, cada banco puede aplicar tasas mayores.
Si bien el Central ya dio luz verde para que los bancos empiecen a aplicar las nuevas tasas, para hacerlas efectivas cada entidad debe notificar previamente a sus clientes. Desde los bancos estiman que las nueva tasas empezarán a regir “en los próximos días”.
El jueves pasado el Central anunció que la tasa de referencia del mercado pasa de 38 al 40%. Y a la vez habilitó un alza de 37 a 39% para los rendimientos de los plazos fijos inferiores a $ 10 millones. Esto representa una tasa efectiva anual del 46,8%, frente a una inflación proyectada para este año en 54%, según la estimación del mercado.
“La comunicación A 7432 que instruye el aumento de tasa de plazos fijos también menciona la posibilidad de incrementar la tasa de revolving de tarjetas de crédito a 49%”, indicaron desde un banco de primera línea.
Ahora los bancos están evaluando cuál será la tasa que aplicarán sobre los préstamos, un tema que el Gobierno sigue con atención porque podría impactar sobre la actividad económica.
Pero los bancos aclararon que el Central no tocó la tasa para financiar la inversión productiva para bienes de capital, que quedará en 30%. “La tasa de financiamiento para capital de trabajo estaba en 35%, vamos a ver en dónde se ubica ahora. La definición es inminente, pero todavía no está”, apuntaron.
Pese a que la tasa que venían cobrando hasta ahora las tarjetas estaba por abajo de la inflación, las operaciones no crecieron demasiado.
Datos de la consultora First Group muestran que la financiación del consumo a través de tarjetas de crédito cerró el 2021 con un incremento interanual de 38,1%, muy por debajo de la inflación del año, prevista en 51%.
En diciembre, las operaciones con tarjetas de crédito registraron un saldo de $1.264.625, un aumento de 3,2% respecto al cierre de noviembre.
“Nos encontramos con un diciembre particularmente flojo para el endeudamiento del público con dinero plástico, las limitaciones y dificultades para utilizar cuotas en los servicios turísticos impidieron una expansión de este segmento a pesar del mayor volumen que alcanzaron las compras navideñas”, aseguró Guillermo Barbero, socio de First Capital Group.
El consumo con tarjetas de crédito en dólares registró una suba interanual del 58,7%, aunque con un comportamiento mensual irregular. En diciembre disminuyeron un 22,3% respecto al mes anterior.
“Aquí se aprecia la influencia que ha tenido la disposición que prohibió el uso de cuotas para servicios turísticos en dólares. Además, el recrudecimiento de los contagios puso un freno inesperado a los viajes entre países y en consecuencia bajan las operaciones en moneda extranjera con tarjetas de crédito”, finalizó Barbero.