Sin datos sobre su paradero prosigue la búsqueda de Emanuel Rodríguez, el presunto asesino de Eduardo Sipper. El cuerpo de la víctima había sido hallado el domingo 3 de diciembre en el departamento que alquilaba en barrio San Martín. La muerte se había producido por una herida de arma blanca en el tórax.
De la redacción de EL NORTE
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Continúa prófugo el sujeto de 25 años sindicado como el autor de las heridas mortales que recibiera Eduardo Joaquín Sipper, de 67 años, quien fue hallado el pasado domingo en medio de un charco de sangre en el departamento que alquilaba en barrio San Martín. Conforme al resultado de la operación de autopsia, el desenlace fatal se había producido por una herida a la altura del tórax efectuada con un arma blanca que le tocó el corazón, ocasionó una hipovolemia y le provocó la muerte.
Apenas se descubrió el cuerpo sin vida, el ojo de la Justicia recayó sobre la última persona que habría estado con él y con quien se cree habría mantenido una discusión. Se trata de Emanuel Rodríguez, un sujeto que sería oriundo del Chaco y que desapareció del departamento que alquilaba cercano al de la víctima la misma noche en que ocurrió el crimen. Los vecinos aseguran que nadie lo vio salir por el portón que tienen en común y que presumiblemente habría huido por los techos.
Según los testimonios de quienes descubrieron el cuerpo, el asesino cerró por dentro la puerta del departamento para asegurarse de que Sipper no fuera auxiliado enseguida.
El hombre habría sido ultimado en la noche del sábado 2 de diciembre por al menos una persona con quien, según trascendió, mantuvo una fuerte discusión. En declaraciones a EL NORTE, sus familiares habían afirmado que quien lo apuñaló le quitó el celular y le cerró la puerta para evitar que pidiera ayuda.
“Hubo saña. Se quiso asegurar la muerte. Yo estoy segura de que él conocía a sus asesinos, que pudieron ser más de uno y que por eso lo mataron. Le llevaron el teléfono y lo encerraron para que muera y no pueda decir quiénes eran. Eso es lo que creo”, explicó al día siguiente del hecho Romina, la esposa del hijo del hombre asesinado.
“Sobre el sospechoso solo sabemos que se llama Emanuel Rodríguez, creo que es oriundo del Chaco y que alquilaba ahí donde vivía mi suegro. No hacía mucho tiempo que se conocían con el presunto atacante. Creemos que no se trató de un robo. Mi suegro era un hombre muy humilde que no tenía nada de valor, solo un televisor que se había podido comprar y no se lo llevaron”, había afirmado la pareja del hijo de la víctima.
La víctima
Eduardo Joaquín Sipper era padre de cuatro hijos: tres mujeres y un varón. Tenía 16 nietos y una bisnieta. Entres sus nietos se encuentra el mediocampista de Talleres de Córdoba Ulises Ortegoza, quien a poco de ocurrido el crimen había publicado en sus redes un emotivo posteo de despedida dirigido a su abuelo. Sipper había nacido en Entre Ríos, en el pueblo de Hasenkamp. Había trabajado como empleado de la industria y hacía unos años que estaba jubilado. Durante mucho tiempo vivió en barrio Las Mellizas y aproximadamente dos años se había ido a vivir a ese departamento de barrio San Martín en busca de un lugar más pacífico.
Respecto de Emanuel Rodríguez, los testimonios indicaban que hacía poco tiempo que alquilaba en el lugar. La propietaria de los departamentos había manifestado que concurría a una iglesia evangélica y se estaba recuperando de una adicción al alcohol.
El cuerpo de la víctima fue hallado en las primeras horas de la tarde del pasado domingo 3 de diciembre por la dueña de la propiedad que el hombre alquilaba en calle Otero al 1200, en el barrio San Martín.
Por el hecho no hay detenidos. La búsqueda del presunto agresor continúa, sin pistas firmes pero de manera incesante. Los investigadores aseguraron que seguirán buscando hasta encontrar al sujeto de 25 años que desapareció tras el homicidio.
