Este sábado se cumplen 28 años del crimen del fotógrafo José Luis Cabezas en una cava de la ciudad turística de Pinamar.
La muerte del reportero sucedió luego de que visibilizara por medio de fotografías al empresario Alfredo Yabrán, a quien nunca se le había visto el rostro hasta 1997.
Cabezas fue hallado muerto dentro de un auto incendiado, con las manos atadas y dos balazos en la cabeza en 1997.
A raíz del asesinato de José Luis Cabezas, la Ley 24.876, promulgada el 13 de octubre de ese mismo año, estableció que el 25 de enero sea considerado el Día Nacional del Reportero Gráfico.
«Fui uno de los que mató a Cabezas»
Gladys Cabezas, hermana del reconocido fotógrafo, contó cómo fue que su hijo charló con Horacio Braga.
A horas de un nuevo aniversario del crimen que marcó un antes y un después, Gladys, hermana de Cabezas, relató que su hijo se encontró con uno de los condenados en un concierto en Baradero.
«Hace 15 o 20 días mi hijo fue a un recital y fue a comprar un choripán. Lo atendió un señor, entre comillas. Mi hijo se pone a hablar con él. “Che, qué bueno esto, el recital”», señaló la mujer.
Lo estremecedor es que a partir de esa charla es que el joven descubre quién era el vendedor.
Es que en medio de la conversación el hombre le respondió: «Sí, yo tengo acá la parrilla esta, de choripanes. Estoy en toda la provincia de Buenos Aires. Yo estuve detenido, fui uno de los que mató a Cabezas».
«Mi hijo quedó perplejo, como yo cuando me enteré», contó Gladys en una radio.
«Era Braga, uno de los asesinos, de Los Horneros. Ese Braga fue el que cuando estuvo borracho contó que había matado a Cabezas, y por eso lo agarraron. Para ellos es un triunfo», expresó Gladys.
«Si en este país hubiera condenas ejemplares, nadie mata a nadie. Porque acá matar es gratis, y encima te jactás de que mataste, como una anécdota», remarcó la hermana de Cabezas.
Tres años después del crimen, el Tribunal de Dolores condenó a cadena perpetua a los instigadores y autores materiales de su crimen.
Allí fueron condenados a la pena máxima el policía Gustavo Prellezo; el custodio de Yabrán, Gustavo Ríos; Aníbal Luna y Sergio Camaratta; y los integrantes de la banda «Los Horneros» Horacio Anselmo Braga, Sergio Gustavo González, Miguel Retana y José Luis Auge.
Yabrán: incógnitas sobre su muerte
El 20 de mayo de 1998, en medio de la investigación sobre su participación en el asesinato del periodista José Luis Cabezas y vigilado de cerca por sus vínculos con las drogas y el lavado de dinero, Alfredo Yabrán apareció muerto de un escopetazo en la cara.
La noticia, que cubrió los titulares de diarios y revistas de todo el mundo, provocó una inevitable conmoción en la opinión pública, que veía al empresario como un personaje muy poderoso, vinculado a lo más importante del arco político vernáculo (neoliberalismo menemista).
Por eso, entre la enorme cantidad de interrogantes que quedaron flotando en el aire, el más fuerte de ellos está relacionado con su propia desaparición.
Y es que, así como una parte importante de la gente asegura que Yabrán está muerto, otra gran cantidad de personas jura que el empresario postal está vivito y coleando en algún lugar paradisíaco de este mundo.