Las tormentas eléctricas inminentes obligaron a los organizadores de la Indy 500 a aplazar el inicio de la carrera, programada para hoy en el Indianapolis Motor Speedway. Las previsiones meteorológicas ya indicaban mal tiempo durante toda la semana y, pocas horas antes de la carrera, se tomó la decisión de retrasar la salida.
La organización informó temprano que el clima no era favorable y solicitó a los asistentes que se refugiaran. “Pedimos a todos los presentes que se protejan en áreas seguras debido a las tormentas eléctricas”, comunicaron los organizadores.
En Estados Unidos, cuando se presenta una tormenta eléctrica, se debe esperar al menos 30 minutos después del último relámpago para reconsiderar el inicio de un evento al aire libre. Por razones de seguridad, las carreras en un óvalo solo se disputan en condiciones secas, lo que deja en duda si la carrera podrá comenzar el domingo.
La organización de la IndyCar anunció que, en caso de no ser posible iniciar la carrera hoy, la Indy 500 se celebrará el lunes. Más tarde, el domingo, se confirmará si se disputará la carrera y a qué hora.