Tras la devaluación pos PASO, el impacto se terminaría de sentir en septiembre. Diversas consultoras mantienen el índice en dos dígitos para el mes en curso.
La Secretaría de Política Económica, a cargo de Gabriel Rubinstein, sostuvo en un comunicado tras conocerse el 12,4% de inflación de agosto que el alto nivel de inflación ha estado influido por la devaluación, principalmente tras las elecciones y consecuentemente en setiembre se evidenciará un “efecto arrastre”, por lo que esperan también un nivel considerable de inflación.
No obstante, en adelante esperan una significativa reducción de las tasas de inflación, lo cual podrá evidenciarse en las mediciones semanales.
Al respecto del “efecto arrastre” y lo que se espera para septiembre y resto de 2023, el economista Gabriel Caamaño de la consultora Ledesma no fue muy optimista. En redes sociales proyectó que “para los que están pensando en lo duro de este número les recuerdo dos cosas: “el IPC es un índice de promedios mensuales por lo que al haberse dado la devaluación en la segunda quincena , la inflación mensualizada de la segunda quincena fue mucho más elevada que el 12,4% y buena parte de eso lo veremos en septiembre”.
Desde Fundación Libertad y Progreso, el economista Lautaro Moschet sostuvo que “el altísimo dato de inflación de agosto deja un panorama desalentador para lo que resta del año y en septiembre lo más probable es que tengamos un dato nuevamente de dos dígitos. El arrastre de agosto de por sí es muy fuerte, por lo que el piso ya parte de un escenario pesimista. A esto hay que agregar que la primera semana del mes arrojó una variación de 3,6% con lo cual tenemos que los precios continúan evolucionando con aumentos significativos. Si bien habrá que ver como continúa la dinámica a lo largo del mes, estimamos que la inflación de septiembre se encontrará entre 11,6% y 13,7%.
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Por su parte, desde Latin Focus destacaron que la inflación se disparará este año en relación a 2022, impulsada por un colapso del peso debido al financiamiento monetario del déficit fiscal.
“Una depreciación del peso más rápida de lo esperado y una generosidad fiscal antes de las elecciones de octubre son los principales riesgos al alza. Los panelistas de FocusEconomics ven los precios al consumidor subiendo 124,5% en promedio en 2023, lo que es un aumento de 8,4 puntos porcentuales con respecto a hace un mes, y subiendo 152% en promedio en 2024″.
Desde LCG, analizaron que en agosto la inflación había empezado a acelerarse por la suba de los dólares libres pre PASO y terminó haciéndolo por efecto de la devaluación. No obstante, es de esperar que el traslado a precio no haya terminado y se vea todavía cierto rezago en septiembre. Por lo pronto, en el Relevamiento de precios de LCG la inflación la inflación semanal de alimentos solo desaceleró en el margen y se sostiene alto, en niveles del 1,8% semanal. El congelamiento del dólar oficial en $ 350, la suba de la tasa de referencia a 118% TNA, la suspensión de los ajustes de tarifas de servicios públicos y la extensión de los acuerdos y congelamientos a un número más grande de productos podrían estar dando resultados, pero será un efecto de corto plazo.
Massa culpó al FMI por la inflación de agosto
Para lo que resta del año y tras las elecciones generales, entienden que el Gobierno deberá avanzar en un y eso tendrá impacto en precios. Actualmente cerca del 40% de la canasta del IPC cuenta con precios reprimidos en algún sentido. Con una inercia que todavía implique registros por debajo de los dos dígitos, la reversión de la medida sumará 10 pp de inflación en diciembre. Sobre esto, se sumará el efecto de descongelar el Dólar Oficial fijado en ARS/USD350. Aún no queda claro cómo se implementará, pero cabría pensar que, más temprano que tarde, intentará recuperar (de mínima) la competitividad inmediata post-PASO. Por lo que la consultora dirigida por Guido Lorenzo proyecta una inflación anual a diciembre del 190%.