La Secretaría de Comercio anunció que los valores al consumidor se retrotraerán al 10 de marzo y criticó duramente a algunas empresas. Las conversaciones y los puntos que se discuten por estos días.
En plena “guerra contra la inflación” el Gobierno convocó a las empresas productoras de alimentos para que justifiquen los aumentos de precios de las últimas semanas y este martes anunció que los precios se retrotraerán al 10 de marzo.
El diagnóstico del Ministerio de Desarrollo Productivo y la Secretaría de Comercio es que las subas de precios que se vieron son, en muchos casos, especulativas y que nada tienen que ver con el incremento de las cotizaciones internacionales del trigo o el aceite de girasol.
“La situación argentina y mundial es suficientemente compleja como para no poder permitir ningún tipo de especulación. La idea es parar la pelota y no avalar los aumentos de las últimas semanas, que no tienen ninguna justificación”, dijeron a cerca de Roberto Feletti.
Además, la Secretaría de Comercio cargó contra algunas empresas y supermercados, en particular, a quienes convocará individualmente y no descarta sancionar por atentar contra +Precios Cuidados.
Pese al anuncio, el Gobierno no indicó el listado de los productos cuyo valor bajará desde este miércoles ni mencionó a las compañías que acordaron esa disminución.
Negociaciones abiertas
Además, más allá de los últimos aumentos “injustificados” que ahora se anularán, hay otros temas pendientes en la mesa de negociación que integran el Gobierno y los empresarios.
Por un lado, el 7 de abril debe renovarse +Precios Cuidados y las productoras de alimentos apuntaban a negociar con el Gobierno la pauta de aumento para el nuevo trimestre. Sin embargo, ya trascendió que será de 12% -a razón de 3% mensual.
“Sí, mandamos un listado nuevo con alzas de 9%. Otras empresas llegaron a remarcar hasta 15%, por lo que el aumento promedio luego de ese discurso fue de alrededor de 12%”
Voceros de otra compañía se manifestaron en sentido opuesto: “Si bien necesitamos el aumento por la suba de costos que estamos viviendo, sabíamos que mandar una nueva lista nos haría quedar muy expuestos y que el Gobierno avanzaría primero con convocar y hasta sancionar a aquellos que hubieran retocado los precios. Es lo que pasó esta semana”.
Según los productores de alimentos, cuando los supermercados reciben las nuevas listas le avisan a la Secretaría de Comercio y no convalidan las subas hasta no tener su autorización. En la industria alimenticia dicen que esa fiscalización actúa como una suerte de esquema informal de precios máximos.