La decisión fue tomada tras advertir que el plus salarial se concedió sin consulta previa y no está ligado a la pauta salarial concensuada.
El flamante ministro de Salud, Mario Lugones, comenzó su gestión con una considerable medida: solicitó la renuncia de todos los miembros del Consejo de Administración del Hospital Garrahan.
Esta decisión fue tomada tras conocerse que la administración había otorgado un bono de $500.000, cifra que no se alinea con la pauta salarial establecida por el Estado Nacional.
Según indicaron fuentes gubernamentales, el agravante es que el Consejo implementó esta decisión sin realizar consultas ni evaluaciones previas que generó un fuerte malestar interno.
Para contextualizar, vale aclarar que en el centro de salud ya existía cierto descontento porque -según la misma fuente-, los miembros del Consejo tendrían un ingreso de $5,5 millones que contrasta fuertemente con lo que perciben los profesionales del centro de salud. Esa supuesta incongruencia motivó que el Consejo otorgara un plus de emergencia.
En efecto, la cartera sanitaria remarcó que la medida de solicitar la dimisión de todos los miembros se enmarca en la necesidad de dejar bien en claro que todas las resoluciones, incluso en dicho sector, deben ser “tomadas con la debida responsabilidad fiscal, siguiendo la premisa del Gobierno Nacional de alcanzar un déficit cero”.