Desde este jueves y hasta el viernes 28 se anunció un paro del campo por el cierre de la exportación de carne por 30 días, dispuesto por el Presidente. La incertidumbre viene del lado de los posibles cierres de frigoríficos y el abastecimiento de las carnes. El gerente del supermercado Carrefour, aseveró a EL NORTE que no habría problemas para tener stock en góndolas, aunque dependerá de la cantidad de kilos que envíen este viernes.
De la Redacción de El Norte
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Luego de más de una hora de reunión virtual, los integrantes de la Mesa de Enlace decidieron organizar un cese de comercialización de todas las categorías de hacienda vacuna, desde las 0:00 del jueves 20 de mayo hasta las 24:00 del viernes 28 de mayo, en rechazo al cierre de las exportaciones de carne vacuna que anunció en la noche del martes el Gobierno de Alberto Fernández.
La medida fue tomada con el fin de poder bajar el precio de la carne, aunque no pareciera ser la solución al problema. Una de las cuestiones que se marca aquí es el abastecimiento en supermercados, por ejemplo, donde se encuentran los cortes a precios bajos. EL NORTE consultó al gerente del supermercado Carrefour, ubicado en calle Mitre, para saber qué es lo que puede pasar con el paro.
“Tenemos la esperanza de que vamos a estar abastecidos por estos ocho días de paro. De hecho, este viernes nos tendrían que llegar 2.000 kilos de carne para intentar llegar al viernes de la próxima semana cuando podamos realizar un nuevo pedido. La idea es ya poder pedir el doble debido a la gran demanda que estamos teniendo”,
manifestó Damián García a este medio.
“Se nos pidió desde el frigorífico al que le compramos carne, que hagamos el pedido con anticipación debido a esta situación de incertidumbre. El problema para nosotros sería si nos llega solo el 50% de lo solicitado, que puede pasar, porque eso nos dejaría dos días sin carne hasta que el viernes próximo llegue el nuevo pedido”, agregó, algo preocupado, el gerente del supermercado de origen francés.
Recordemos que los frigoríficos suelen tener stock ya que compran en grandes cantidades para poder abastecer a varias cadenas de supermercados o carnicerías. Pero la problemática podría aparecer después del paro, ya que se deberían iniciar los procesos de producción desde cero y sin stock suficiente en los frigoríficos para mantenerse mientras se esperan los productos.
“Creo que el problema lo podríamos llegar a tener en el post paro, cuando se tenga que reanudar toda la producción y no haya stock para abastecer a todos. Calculo que eso sería lo más perjudicial y lo que podría afectar a San Nicolás. Por ahora, estamos bien”, aseveró García.
Vale destacar que, de lunes a viernes, continúa funcionando el programa de carnes a precios bajos propuesto por el Gobierno nacional, a fin de poder conseguir una ayuda al bolsillo de la gente. Los nicoleños se han visto beneficiados por este programa y se notó una clara inclinación por los once cortes que están enmarcados en este convenio. En solo dos días se compraron 2.100 kilos de carnes a precios bajos en nuestra ciudad.
Diputados en contra
Diputados bonaerenses de Juntos por el Cambio presentaron dos proyectos legislativos para rechazar el cierre de las exportaciones de carnes que dispuso el gobierno nacional, al considerar que “ese tipo de decisiones intempestivas ya fracasaron, y lo único que hacen es poner en peligro los mercados”.
Las iniciativas fueron presentadas por los diputados Emiliano Balbín y Susana Lázzari, quien preside la comisión de Comercio Exterior, y acompañados por sus pares de bancada, como por ejemplo Santiago Passaglia. “Este tipo de decisiones intempestivas no hace más que poner en peligro los mercados, generar mayor incertidumbre en la sociedad y perjudicar profundamente a nuestros productores”, señalaron los legisladores.
Balbín y Lázzari agregaron que “sin embargo, la adopción de dichas medidas limitantes del comercio internacional, ya han mostrado la ineficacia y su rotundo fracaso en términos económicos, ambientales y sociales”.
En el mismo sentido, Maxi Abad, titular del bloque, señaló que “el sector agropecuario se ha declarado en alerta por la muy mala experiencia anterior. Las estadísticas demuestran que entre 2006 y 2015, cuando estuvieron vigentes los llamados Registros de Operaciones de Exportación (ROE), los cuales fueron en rigor de verdad permisos, cuotas y no solo un mero registro, el objetivo buscado fue bajar los precios internos de la carne. Pero ello, no ocurrió: entre enero de 2006 y diciembre de 2011 el precio de la carne subió 300%, mientras que la inflación del país en el mismo periodo (según INDEC e Inflación Verdadera), fue del 200%”.
“A esto, se suman otras consecuencias como la pérdida de mano de obra, cierre de frigoríficos, perdida de productores ganaderos, pérdida de divisas para el país, pérdida de mercados ganaderos existentes, pérdida de confianza por parte de compradores de carne, pérdida de mercados potenciales de alto poder adquisitivo, pérdida de inversiones de parte de toda la cadena ganadera, pérdida de potenciales nuevos empleos, pérdida del stock ganadero, merma en la producción de carne del país, merma en el consumo per cápita de los habitantes de Argentina, y fuerte aumento en el precio de la carne al consumidor”, agregó el diputado vidalista Alex Campbell.