Un grupo de productores agropecuarios que se encontraban cosechando soja en un campo ubicado en la zona rural de Rancagua cerca de la ruta provincial Nº 32 habrían encontrado más de 80 kilogramos de cocaína, distribuidos en ladrillos de papel metálico.
El hallazgo tuvo lugar durante la tarde del pasado domingo. Los trabajadores rurales dieron pronto aviso a las fuerzas de seguridad las que se hicieron presentes en el lugar y procedieron al secuestro de 90 envoltorios con droga. Se presume que el cargamento ilícito es traído desde el norte del país y habría sido arrojado desde una avioneta.
Los primeros efectivos policiales que se hicieron presentes en el lugar pertenecen al Destacamento de Rancagua y de la Comisaría Segunda. Posteriormente arribaron los integrantes de la Delegación Departamental de Investigaciones del Tráfico de Drogas Ilícitas y Crimen Organizado de Pergamino, quienes junto al fiscal Francisco Furnari, titular de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Nº 2 tematizada en este tipo de delitos, realizaron las actuaciones correspondientes y los protocolos que deben ser practicados.
La cocaína quedó incautada bajo un fuerte operativo de seguridad en la dependencia de Drogas, ubicada en Azcuénaga entre Lagos y Echeverría de Pergamino. Posteriormente se dio intervención al Juzgado Federal Nº 2 de San Nicolás que preside el Dr Carlos Villafuerte Ruso
Hallazgo anterior
En los últimos días del mes de enero otro multimillonario golpe al narcotráfico tuvo lugar en un campo ubicado entre Rancagua y Pergamino. En esa oportunidad Personal de la Delegación Departamental de Investigaciones del Tráfico de Drogas Ilícitas de Pergamino había incautado un cargamento de cocaína de casi 150 kilogramos, valuada en aproximadamente un millón de dólares.
Cuatro narcotraficantes, dos mujeres y dos varones, habían sido detenidos por los efectivos de Drogas Ilícitas que llevaron adelante las tareas en forma conjunta con otras fuerzas locales. Para dar con esta organización internacional (que contaba con bolivianos, argentinos, paraguayos y brasileros), la Delegación local había trabajado durante cinco meses en tareas investigativas encubiertas que derivaron en la actuación.
El operativo estaba montado cuando una avioneta (Cessna Centurión) de última generación que venía de Bolivia, arrojó en un campo ubicado detrás del ex Balneario Toro (actualmente camping de Sindicato de Choferes de Camiones) cuatro envoltorios de gran tamaño, los cuales contenían “ladrillos” de cocaína de máxima pureza.