El gremio liderado por Roberto Fernández y las compañías prestadoras de los servicios urbanos volverán a reunirse hoy con los empresarios. La UTA pide una actualización salarial del 27% para enero y otro 33% para febrero, según detallaron. De no avanzar con la primera actualización de 2024, el jueves se paralizaría la actividad en todo el país.
De la redacción de EL NORTE
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La Unión Tranviarios Automotor (UTA) y las cámaras empresariales del sector se reunirán hoy martes 23 de enero en el marco de las negociaciones paritarias 2023. El cónclave, que se desarrollará de manera virtual y un día antes del cese de actividades parciales por el paro general convocado por la Confederación General del Trabajo (CGT), buscará actualizar las escalas modificadas en diciembre (+22%) y que dejó un básico bruto inicial de $611.000.
“El motivo es la falta de garantía expresa de las tres jurisdicciones que financian al sistema (CABA, PBA y Nación) sobre las compensaciones, y/o tarifas en su defecto, necesarias para cubrir dicha actualización salarial”, explicó la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA), espacio que reúne a distintas firmas prestadores de servicios.
El gremio conducido por Roberto Fernández buscará abrochar una actualización salarial del 27% para enero y otro 33% para febrero, según detallaron al portal Gestión Sindical.
Además, se intentará activar la cláusula gatillo “a fin de proteger a los trabajadores en caso de que la inflación proyectada sea mayor”. De no avanzar, el jueves 25 podría darse un nuevo escenario de paro en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
Por su parte, desde el ala empresarial insistieron en la imposibilidad de encarar la negociación ante el esquema “desfasado” que muestra la logística del transporte “producto de la inflación”.
El acta de la audiencia
La última audiencia de conciliación entre la Federación Argentina de Transporte Automotor de Pasajeros (Fatap) y la Unión Tranviarios Automotor (UTA) fue convocada por la Secretaría de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, dependiente del Ministerio de Capital Humano.
“La actividad está sumida en una crisis gravísima, y empeora diariamente ante el sostenido incremento de los insumos que se requieren para mantener operativos los servicios, motivo por el cual, en este estado, resulta imposible acceder al reclamo de la entidad sindical. Más aún, impide siquiera analizar cualquier incremento en los salarios vigentes dado que, como ha sucedido en numerosas provincias, el cumplimiento de los salarios vigentes se ha tornado inviable, generando conflictos e interrupciones de servicios de modo permanente”, explicaron los empresarios, según consta en el Acta de la audiencia. Incluso, las autoridades de Fatap cargaron contra el Gobierno por la ausencia -en la audiencia- de las autoridades de la Secretaría de Transporte de la Nación y del Cofetra.
“Esto confirma nuestra afirmación, vertida en la audiencia anterior, en el sentido de que, en materia de transporte por automotor de pasajeros del interior del país, la política de estado permanente parecería ser la de mantener las asimetrías en la asignación de asistencias en perjuicio del interior y una clara indiferencia respecto del destino de un servicio esencial para millones de argentinos que carecen de la posibilidad de optar por otras modalidades de transporte público”.
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La UTA, en tanto, manifestó: “No nos vamos a involucrar en la relación entre el Estado nacional, las provincias y los municipios con las empresas. Pero entendemos que claramente, por acción o inacción, nos colocan a las puertas de un conflicto por salarios. Son por todos conocidos los fuertes incrementos de precios, especialmente alimentos. Lo venimos advirtiendo, si no alcanzamos un acuerdo paritario que reconozca el grave deterioro que vienen sufriendo los salarios de los trabajadores por el mes de diciembre y lo que se estima como proyección para los dos primeros meses de este año en curso, nos llevarán a realizar medidas de fuerza para defender el poder adquisitivo de los salarios”.
El pedido de UTA
El gremio lo dejó en claro: “No resignaremos en el justo pedido de reconocimiento del 22% sobre los sueldos básicos vigentes al mes de diciembre, debiendo tal porcentaje tener carácter de piso mínimo a cuenta de los incrementos para el mes de enero. No vamos a ser los trabajadores la variable del ajuste de las empresas. Pedimos urgentemente a las máximas autoridades de la Secretaría de Trabajo y Transporte, junto con los representantes de Cofetra, que intervengan en la solución de la problemática salarial de los trabajadores de transporte de pasajeros del interior del país, para evitar las consecuencias para la sociedad que puede generar la paralización de los servicios”.
“Ponemos en conocimiento del sector empresario y de las autoridades intervinientes, que nos obligan, nos llevan a esta situación, por lo que atento la negativa a acordar salarios, nos declaramos en estado de alerta hasta la próxima audiencia, esperando una respuesta al pedido salarial, insistiendo en que nos encontramos ante las puertas de un conflicto del que los trabajadores no somos responsables”.
Vercelli pagó
Vercelli Hnos. depositó el viernes el 50 por ciento de los haberes correspondientes a diciembre pasado, con lo cual quedó saldada la deuda salarial que la empresa mantenía con sus trabajadores. Con esta promesa se había desactivado –el martes pasado– la posibilidad de que el gremio lanzara un paro total de la actividad. Aunque la UTA San Nicolás exige que la deuda del 50 por ciento del segundo medio aguinaldo 2023 se cancele antes de que termine enero, con lo cual la amenaza de paralización del servicio continúa latente.