En los últimos diez meses del año se incautaron en San Nicolás 38 kilos de marihuana, una gran cantidad de plantas de cannabis, casi 6 kilos de cocaína y 46 pastillas de éxtasis. Desde la Fiscalía Tematizada en Estupefacientes informaron a EL NORTE que los procedimientos efectuados hasta el momento no revelan que haya ingresado el paco o la droga de diseño como hábito de consumo a la ciudad.
De la redacción de EL NORTE
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El tráfico, la comercialización y el consumo problemático de estupefacientes sigue siendo uno de los flagelos que más preocupa a la sociedad en general. San Nicolás no es la excepción. En los últimos diez meses del año pasado, la Fiscalía Tematizada en Estupefacientes junto con la Delegación Departamental de Investigaciones de Drogas Ilícitas secuestraron en numerosos procedimientos una importante cantidad de estupefacientes atendiendo a que la jurisdicción provincial se ocupa del último eslabón de la cadena que es el narcomenudeo.
Incautaron en la ciudad, en ese lapso, 38 kilos de marihuana y casi 6 de cocaína, 46 pastillas de éxtasis y una gran cantidad de plantas de Cannabis sativa. Un dato tranquilizador es que no hallaron paco, que es la pasta base de la cocaína, una sustancia de muy mala calidad con efectos que son devastadores a corto plazo. Tampoco detectaron drogas de diseño como LSD o tusi entre el material comercializado.
En diálogo con EL NORTE, consultada sobre la problemática del consumo en la ciudad, la agente fiscal Verónica Marcantonio informó lo siguiente: “Según los estudios realizados en San Nicolás, que no difieren de los del resto del país, la edad promedio de iniciación en el consumo de marihuana es entre los 13 y 15 años. El consumo de tabaco y alcohol entre adolescentes también tiene efectos dañinos y permanentes y generalmente de ahí parten para luego pasar al consumo de drogas ilegales como la marihuana. Existe una tendencia a querer experimentar sensaciones cada vez más fuertes. Después del cannabis suelen pasar a la cocaína, entrando así en una espiral de consumo que puede derivar en un policonsumo”.
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“La marihuana es una de las sustancias psicoactivas más consumidas y también mas aceptadas en San Nicolás, como en el resto del país, debido a su naturalización y su fácil acceso especialmente entre los jóvenes. Y lo más preocupante es que la mayoría considera que su consumo es inofensivo o, como dicen comúnmente, ‘la marihuana no hace nada’, cuando la realidad es que puede tener graves consecuencias para la salud y el bienestar”, expresó la fiscal Verónica Marcantonio.
Entre los factores de riesgo para la iniciación en el consumo, la funcionaria apuntó a “la presión de los pares, la curiosidad, la falta de información y educación sobre los riesgos, la disponibilidad y accesibilidad de la marihuana en el mercado ilegal y la influencia de la cultura y los medios de comunicación”. En cuanto a las modalidades explicó que suelen fumarla en forma de cigarrillos o porros, consumirla en forma de comestibles o bebidas o tomarlas a través de vaporizadores o pipas.
Confusión con el consumo medicinal
La funcionaria destacó que es un grave error confundir el consumo medicinal con el consumo ocioso. En 2020 el Ministerio de Salud nacional creó el Reprocann (Registro del Programa Nacional de Cannabis Medicinal) para legalizar a usuarios, cultivadores medicinales y médicos que garantiza el acceso a los derivados del cannabis para los pacientes específicamente indicados. Actualmente el Gobierno nacional modificó los requisitos de inscripción y la cantidad permitida de plantas cultivadas por personas con autorización debido a que con anterioridad se extendieron certificados a ciudadanos que en realidad no requerían de terapia alguna, utilizándolo con fines recreativos. Las encuestas revelaron que el 82,4% de las personas consultadas le dan un uso recreativo, el 13,5% la consume con fines medicinales propios, el 3,7% tiene marihuana para el uso terapéutico de un tercero y el 0,4%, para su mascota.
Desde la Fiscalía explicaron que “El consumo y la posesión de marihuana son delitos en la Argentina, y pueden llevar a sanciones legales, como multas y penas de prisión. Puede afectar las relaciones familiares y laborales, llevar a la pérdida del empleo y la estabilidad económica. En cuanto a la prevención, la educación y la conciencia sobre los riesgos del consumo de marihuana son fundamentales. Es necesario el apoyo familiar y social para ayudar a las personas que consumen marihuana a dejar de hacerlo y procurar un tratamiento profesional especializado.
Consecuencias y prevención
La fiscal Marcantonio advirtió, además, que el consumo es especialmente dañino durante la adolescencia. “El consumo frecuente tiene efectos negativos de manera permanente. Se ha demostrado que el cannabis y sus derivados afectan la memoria e impiden el desarrollo neuronal definitivo de los jóvenes generando consecuencias severas e irrecuperables. Altera la memoria y el aprendizaje afectando el rendimiento académico y laboral. A corto plazo produce alteraciones en la percepción, la coordinación y el equilibrio. Puede causar problemas respiratorios, tos, bronquitis y neumonía. Aumenta el riesgo de desarrollar ansiedad, depresión y psicosis. Favorece la agresividad y pérdida del autocontrol. Genera dependencia y adicción y reduce el rendimiento intelectual, sin margen de recuperación”, alertó Marcantonio.
En conclusión, desde la Fiscalía tematizada, destacaron que el consumo de marihuana puede tener graves consecuencias para la salud y el bienestar. “Es importante que los jóvenes de nuestra ciudad y de la Argentina en general sean conscientes de los riesgos del consumo de cualquier droga. La educación, el apoyo familiar y las medidas preventivas de los organismos gubernamentales y no gubernamentales resultan fundamentales para concientizar y evitar que siga naturalizándose de una manera tan alarmante el consumo de la marihuana bajo el lema de que ‘no trae consecuencia alguna’. Debemos, como sociedad, ser conscientes de que el consumo es una problemática que cada vez se hace más grande”, advirtieron desde la Fiscalía Tematizada en Estupefacientes a cargo de la fiscal Verónica Marcantonio.