Falta poco para que las Fiestas lleguen. Cuatro semanas para que Papá Noel deje los regalos debajo del arbolito y las sonrisas, principalmente de los más chiquitos, iluminen las casas por la alegría de haber recibido lo que pidieron en la cartita. Sin embargo, hay veces que Papá Noel no puede con todo, ahí interviene la organización Misión Papá Noel, que ayudará a que todos los niños de distintos merenderos, comedores y hogares tengan su regalo.
Guillermo Puliti
Se acerca Navidad, una de las festividades más importantes para muchos. Un momento de encuentro con familiares y amigos, emotivo por donde se lo mire. Pensando en poder darse un momento de goce, de descanso, de disfrute; pero infaltables son los regalos, la magia que genera que Papá Noel llegue a tu casa para dejarte un presente debajo del arbolito.
Sin embargo, cierto es que no muchos pueden costear esos paquetes, los cuales nadie sabe qué tienen hasta que se rompe la envoltura. Cuando no se puede, siempre sale esa solidaridad humana, de una forma u otra se intenta ayudar. Aquí interviene en ello, Misión Papá Noel, una organización nicoleña que desde hace cinco años se dedica a poder regalarle a todos esos niños y niñas el regalo deseado.
“Hoy puedo definir Misión Papá Noel como una organización, donde lo que hacemos es conectar las cartas de los niños de comedores, merenderos y hogares de San Nicolás, con una persona que pueda hacerse cargo del deseo de ese niño o niña como pedido de Navidad”, afirmó Silvina Laso, la fundadora de tan increíble proyecto.
Hace cinco años que Silvina Laso, junto a un gran número de colaboradores, que se hacen llamar “duendes”, lleva adelante ésta iniciativa solidaria. Éste año, el número es realmente increíble: más de 1.600 niños y niñas entraron en el sistema de Misión Papá Noel y aún se siguen sumando.
“Hoy te puedo dar un número estimativo, pero la realidad es que pueden ser muchos más, de hecho se nos agregó un merendero el jueves. Esto supone que van a ser muchas más cartitas a entregar pero la suerte que tenemos es que nos sobran personas que quieren cumplir el sueño navideño de algún niño o niña. Es muy personal lo que te voy a decir, pero no puedo decirles que no cuando se quieren sumar y me piden, ver la felicidad de los niños al abrir sus regalos no tiene precio”, contó Laso.
Cómo funciona
Algo que parece tan fácil de explicar, en realidad es más difícil de lo que se cree. Al principio, la cantidad de niños y niñas era baja por lo que se lograba organizar todo de una mejor manera, pero al crecer tanto y, afortunadamente, habiendo tantos nicoleños queriendo ayudar, la situación a veces se desborda.
“Toda la logística es abrir la convocatoria para que todos los merenderos, comedores y hogares de San Nicolás que quieran participar puedan hacerlo. Una vez que cada niño y niña haya escrito su cartita, nosotros la entregamos a cada persona que se inscribió para ayudar y así poder cumplir con el deseo navideño”, explicó Laso.
De inmediato, añadió que “entonces, éste año lo que decidimos hacer fue armar una cartita pre diseñada, las cuales entregamos a todos los lugares que se adhirieron, para que los niños las completen. Tuvimos que hacerlo porque solía suceder que, hacían las cartitas ellos y pedían un par de botines, pero no ponían el número de calzado. Esto generaba una complicación para esa persona que tenía que regalar esos botines y terminaban optando por regalar otra cosa”.
“También, tuvimos que implementar las cartitas pre diseñadas porque solían faltarnos datos importantes: las edades, nombre y apellido del niño o niña para poder identificar los paquetes que había que entregar, entre otras cuestiones. Nosotros solo hacemos contacto con los referentes de esos comedores, merenderos o hogares, por lo que no conocemos a los niños”, agregó Silvina Laso.
“Una vez que se completan las cartitas y nos las devuelven, nosotros se las enviamos a cada nicoleño que se ofreció para ayudarnos. A la par, les indicamos a esas personas cuándo y dónde deben dejar los regalos que les tocaron comprar. Es decir, toda una logística que lleva mucho tiempo y que no sería posible sin Nadia, mi coequiper, y todos los duendes que nos ayudan”, se explayó.
Nicoleños solidarios
Hasta el cierre de ésta edición, la página web que Misión Papá Noel tiene para poder cargar las cartitas y suscribir a quienes deseen cumplir el deseo de Navidad, estaba parada. “Nosotros cargamos muchas cartitas pero no todas y ya cubrimos esa demanda. Saturamos tanto la página que no nos quedó otra que frenar un poco para poder cumplir con todos. Nos mandan mensajes preguntando si todavía pueden ayudar y obvio que sí, pero pedimos paciencia para que podamos tener todo organizado”, aseveró Laso.
Primera misión
Misión Papá Noel surge gracias a la hija de Silvina Laso. “En el 2018, mi hija que en ese entonces tenía cuatro años, pidió por primera vez un regalo. En ese momento, pidió una muñeca realmente costosa, entonces tuve que decirle que no siempre Papá Noel puede llevar lo que se pide y que hay muchos niños que a veces no reciben regalos. Esa respuesta fue suficiente para ella por suerte, pero no para mí”, dijo Laso.
“Entonces ahí me pregunté por qué no todos los niños reciben lo que quieren. Al tener contacto con otras organizaciones, empecé intentando lo que hoy nosotros llamamos Misión Papá Noel pero con amigos y familiares. El Hogar El Amanecer fue la primera misión, ellos hicieron las cartas, 70 en ese momento y logramos cubrirlas sin problemas. Así fue como empezó todo esto que no pensamos cortar nunca”, conmovió con sus palabras Laso.