En una imperdible charla, Lionel Messi intercambió con el francés conceptos tácticos y repasó su carrera.
El capitán de la Selección Argentina, Lionel Messi, tuvo una charla con el ex jugador Zinedine Zidane y compartieron sus experiencias y visión del fútbol.
La charla fue organizada por la marca de las tres tiras que patrocina a ambos jugadores en las instalaciones del club donde juega Messi en estos momentos. “Se trata de una conversación que trasciende lo ordinario, ofreciendo ideas y perspectivas de dos iconos del deporte rey” informaron desde la marca.
En primera instancia, el francés y el argentino analizaron sobre la figura del número diez y lo que significa dentro de la cancha. “El 10 era el jugador diferente. Todos queríamos ser el jugador diferente y todos nos creíamos eso. Por eso, todos queríamos tener ese número. Reflejaba que eras el enganche o el media punta, cómo lo llamábamos nosotros. Hoy no sé si es tan así. Hay muchos equipos que juegan 4-3-3 y tiene más interiores que número 10. Tampoco entran en un 4-4-2″, explicó Messi.
Y ahí resaltó a dos de su referentes: Juan Román Riquelme y su confeso ídolo, Pablo Aimar. Además de afirmar que ya no se ven jugadores como ellos. “El fútbol cambió mucho. Cambió la manera de jugar, cambiaron los sistemas. Ya de chiquitos empiezan a jugar 4-3-3 o con una línea de tres o de cinco defensores. El número 10 no entra en esos sistemas o es difícil meterlo. Quizás, de esa manera, se perdió la formación de esos jugadores”, analizó el jugador del Inter de Miami.
Y hablando de número diez fue imposible no nombrar a Diego Armando Maradona. “Para los argentinos el 10 es un número muy especial, porque vos hablás del 10 y automáticamente se te viene Maradona a la cabeza. Toda la vida, los que crecimos de chiquitos con el fútbol, queríamos ser como él. Si bien después ninguno llegó, el deseo siempre era ese, intentar de copiar lo que hacía Maradona”.
A los elogios de Leo, se les sumaron los de Zizou. “Maradona era un ídolo para todo el mundo, no solo para los argentinos. Entonces para ustedes hablar de Maradona, y sobre todo vos con lo que has hecho, al final es muy bonito. De pequeños queríamos tener todos el número 10. Es líder”.
En otro pasaje de la entrevista, Messi también habló sobre la relación de sus hijos con el fútbol. “A mis hijos les encanta el fútbol, son unos apasionados los tres. Son chiquitos, generalmente cuando sos chiquito te gusta estar arriba, hacer goles” sentenció.
Tampoco evitaron hablar del uruguayo Enzo Francescoli, por quien Zidane siente un cariño especial. “No había muchos extranjeros en Francia, cuando vino Enzo, un sudamericano, ya vimos que era otro fútbol, diferente. Hacía cosas con el balón que era un mago. Yo quería hacer lo mismo” recordó el francés. A lo que Messi agregó: “Bueno yo era chico también, pero lo vi en la época de River, que ganaban todo en ese momento. Tenían un equipazo. Lo aman en River, hoy por hoy sigue en el club trabajando. Tuve la suerte de conocerlo y es una gran persona”.
Y nuevamente, Lionel confesó su fanatismo y admiración por quien fuera su compañero en la Selección y ahora parte del cuerpo técnico, Pablo Aimar. “Siempre dije que me gustaba mucho Aimar, que llegaron a jugar juntos con Enzo. Después fue al Valencia. Un jugador que me encantaba su manera de jugar, al que seguía, jugaba en un River también que tenía un gran equipo y él destacaba mucho. Sacando a Diego (Maradona), que era un caso aparte y para nosotros primero es Diego y después el resto, Pablo (Aimar) era una persona que admiraba mucho como jugador. Incluso en esa época por ahí no seguía tanto de chico el fútbol europeo, cuando vas creciendo y te vas dando cuenta de más cosas, ahí sí empezas a ver mucho más fútbol de Europa. Pero en ese momento era local, de Argentina, y Pablo me gustaba mucho”.
Ya repasando su etapa en el PSG, Leo asumió que le costó usar la camiseta con el dorsal 30, pero luego se acostumbró. “El 10 sigue siendo una camiseta especial. Yo estaba muy acostumbrado a usar la 10 en Barcelona, en la Selección, pero cuando llegué a París no. Si bien no me importaba y no pasaba nada, extrañaba un poco el tener mi número porque lo había usado toda la vida pero me fui acostumbrando, porque el 30 era una camiseta significativa. Yo empecé con el 30, debuté con el 30 y tenía algo especial”.
Ya hablando más íntimamente, Leo resaltó lo importante que es el acompañamiento de los padres hacia los hijos y recordó cómo lo ayudaban su mamá y papá cuando era chico.
Para cerrar, ninguno de los dos se guardó nada y se elogiaron mutuamente. “Leo es magia. Es lo que me gusta, no estamos todos los días juntos pero hoy es un día importante para decirle la admiración que tengo por él. Es pura magia, sabía lo que había que hacer y ver a alguien así… casi sabía lo que iba a hacer cuando lo miraba. Cuando lo veo hacer eso digo, esto ya está. Es lo que quiere ver la gente en el fútbol, un jugador como pocos” dijo Zizou sobre el diez.
Y el ex Barcelona le devolvió los halagaos y dijo: “Para mí Zidane es uno de los más grandes de la historia. Siempre lo admiré y lo sufrí también cuando estaba en el Madrid porque yo era del Barcelona. Me acuerdo la época de los Galácticos, de la Copa Europa, que tenían un equipazo, pero él siempre fue un jugador diferente, tenía arte, magia, todo. No es porque esté acá pero para mí es uno de los más grandes de la historia. Tengo muchos recuerdos de él”.