El atacante con pasado en Vélez y el Xeneize regresará con su familia a Argentina, donde rechazó varias ofertas de Primera División antes de iniciar su segundo ciclo en las tierras de Jair Bolsonaro.
La segunda odisea de Mauro Zárate por Brasil duró tan solo un mes. Es que el delantero argentino le pidió la salida a los dirigentes y rescindió su contrato con Juventude, donde recaló después de su breve paso por América Mineiro, por cuestiones personales.
Zarate, quien fue sondeado por Gimnasia, Colón, Talleres, San Lorenzo y Racing en el último mercado de pases del fútbol argentino, había marcado un gol para Juventude, por el Gaúcho. Fue en su debut ante Clube Esportivo Aimoré (1-1) en São Leopoldo, ciudad del estado del Río Grande del Sur.
El ex-Boca había firmado un contrato hasta diciembre con Juventude, que el año pasado cumplió el objetivo de mantener la categoría en el Brasileirao luego de ascender, y recién se había incorporado al plantel el pasado 11 de febrero.
Lo cierto es que es muy prematuro hablar sobre el futuro de Zárate, de 34 años, sobre todo si se tiene en cuenta que el libro de pases de Argentina está cerrado. Por lo pronto, el delantero no podría firmar con ningún club hasta junio, con excepción en San Lorenzo, que tiene un cupo abierto por la lesión de Gonzalo Luján.