A un día de la huelga nacional convocada por la CGT, el presidente de Ternium Argentina manifestó su desacuerdo con la medida de fuerza. “Estos paros preventivos lo único que hacen es castigar al trabajador, hacernos perder confianza como país, confianza del inversor, y va a afectar el nivel de actividad también”, sostuvo Berardi. Además, señaló que la empresa descontará el día y el presentismo, lo que representa para los trabajadores del sector entre $ 50.000 y $ 70.000.
De la Redacción de EL NORTE
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El presidente ejecutivo de Ternium Argentina, Martín Berardi, marcó la difícil situación socioeconómica que está atravesando nuestro país y se pronunció acerca del paro general convocado por la Confederación General del Trabajo (CGT) para este miércoles en contra de las medidas propuestas en la ley ómnibus y el DNU del presidente Javier Milei.
“El país atraviesa una delicadísima situación económica que está teniendo un impacto en la actividad importante y con una inflación altísima, vamos a superar el 200 por ciento de inflación anual”, contextualizó. Ante lo cual, marcó que “la actividad se ha venido deteriorando desde hace tres o cuatro meses” en los cuales no tuvieron acceso a las divisas para pagar importaciones de materias primas críticas, “consecuencia de que el país se quedó sin reservas”.
Dicho panorama impactó en la actividad de la planta local de Ternium. “Esto nos obligó, a nosotros en particular, a tener que bajar el ritmo del alto horno para llevarlo al mínimo técnico, mirar el stock para ver hasta cuándo aguanta y bajar los despachos y la actividad entre un 25 y 30 por ciento. Esto le pasó a todo el país y a toda la industria siderúrgica, es decir, el país se quedó sin insumos y tuvo que parar la actividad”, aseveró Berardi y sumó: “Esto nos hace pensar que el país necesitaba un cambio”.
Situación que también llevó a desacelerar las nuevas contrataciones de personal y adelantar vacaciones. “Hemos evitado incorporar gente para cobertura de vacaciones, hicimos paradas de planta y enviamos personal de vacaciones masivamente. Así vamos a seguir durante enero y febrero, y en marzo veremos dónde se establece la actividad después de este inicio de corrección de variables macroeconómicas, y volveremos a pensar toda la situación”.
Paro “inoportuno y preventivo”
A un día del paro general convocado por la CGT, el presidente de Ternium Argentina manifestó su total desacuerdo con la medida de fuerza. “Me parece un paro inoportuno y preventivo que tiene más una connotación política que otra cosa. La situación está muy delicada en términos de ingresos reales de los trabajadores como para ocasionar una pérdida de ingreso que lo único que hace es empeorar la situación”, sentenció, y ratificó que a quienes no asistan a trabajar se les descontará el día y el presentismo, lo que representa para los trabajadores del sector entre $ 50.000 y $ 70.000. “El que no trabaja no cobra. Es tan sagrado el derecho a huelga como el derecho a no pagar un trabajo no entregado, no es algo que se negocia”, afirmó.
“Si uno no está de acuerdo con algún punto de la ley ómnibus o del DNU, hay caminos como el Congreso o la Justicia; analizarlo donde se deben dar los consensos para que esto siga adelante y de qué forma. Estos paros preventivos lo único que hacen es castigar al trabajador, hacernos perder confianza como país, confianza del inversor, y va a afectar el nivel de actividad también. Estoy en desacuerdo”, manifestó Berardi.
Quien sostuvo que transmitieron al sindicato que “incluso la ley ómnibus y el DNU no afectan tanto la actividad ni el gremialismo siderúrgico como para que justifique un paro de estas características”.
“Es importante un cambio”
Respecto de su visión sobre las medidas del Gobierno mediante el DNU y la ley ómnibus, el presidente de Ternium Argentina refirió: “En general compartimos todas aquellas medidas que tiendan a reducir el déficit fiscal. La madre de los problemas económicos de la Argentina que hace 12 años que no crece, con tres gobiernos de distintas características que no le encontraron la vuelta, es por el déficit fiscal. Hay que convencernos como sociedad de que hay que erradicarlo lo más rápidamente posible”. Asimismo, se mostró a favor de “liberar la fuerza del sector privado, que es el sector que tiene que invertir. Hay que bajar el gasto público y favorecer para que crezca el sector privado que, en definitiva, es el que paga los impuestos y puede ayudar al déficit fiscal”. Otro punto que considera positivo es la competitividad. “La Argentina sale para adelante exportando más e invirtiendo más, y para eso es necesario ser competitivo”, sostuvo. Aunque refirió que no están de acuerdo con el 15 por ciento de retención a las exportaciones industriales.
“Más allá de que se negocie un punto u otro, es importante un cambio para que se vuelva a exportar y a invertir el sector privado, hay que mandar una señal de reglas claras y desburocratización de la economía. Es importante”, concluyó Berardi.