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martes, noviembre 26, 2024
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MARIELA DÍAZ CAMINOS: “MI VIDA PASA POR EL BAILE Y AMO HACERLO”

ENTREVISTA

Mariela Díaz Caminos es admirada por su notable trabajo en su academia “On One Dance Studio”, primera escuela de Pole Dance (baile del caño) de Villa Constitución. Junto a su hermano Marcelo, hoy en Estados Unidos, llevó adelante la misma con una enorme cantidad de alumnos y alumnas que se suman diariamente y absorben los conocimientos que “la profe” les brinda.

Tu hermano Marcelo te dejó a cargo de la academia y ahora, sos la nueva vocera.
“Jajajaja, exactamente, no me gusta mucho esta nueva función, pero no me queda otra. Él trabajaba conmigo, daba clases, se ocupaba de las entrevistas, de la difusión y ahora se fue a Nueva York a capacitarse, lo agarró la pandemia y se quedó. Creo que ya no vuelve porque consiguió trabajo allá y yo me quedé a cargo de todo”.

¿Es correcto que te llamemos bailarina?
“Yo me catalogo de esa manera porque es mi pasión y amo bailar; pero soy instructora y profesora de baile, de pole dance y de casi todas las acrobacias aéreas”.

¿El baile del caño o pole dance, nació mucho antes que Tinelli lo popularizara en su programa de televisión?
“Tinelli lo hizo popular y muy conocido, pero no tiene nada que ver con lo que se vio en pantalla, porque él lo hizo muy sexual. Claro que tiene un poco de sensualidad, pero se requiere mucha destreza, elongación, fuerza, actitud y es muy antigua”.

¿De cuánto tiempo estamos hablando?
“Nació en la India hace 250 años atrás y lo hacían solo hombres. Además, el tubo o caño que nosotros usamos en la actualidad, era de madera y más grueso. Ellos lo usaban como actividad física y yoga. Con el tiempo, fue adquirida la actividad por China y se llegó al caño propiamente dicho, más alto y con la llegada de las mujeres. Es una actividad muy compuesta porque posee danza clásica y yoga en forma conjunta”.

Viéndote tan amante de la actividad física, ¿de niña elegiste las muñecas u otros juegos?
“Yo vivía en Barrio Parque Sur y la mayoría de mis amigos eran varones, sólo había una nena más. Así que imaginate que, con eso, más mis dos hermanos varones, las muñecas estaban alejadas, jajajaja. Yo me trepaba a los árboles, jugaba a la bolita, era un varón más, jajajaja. A los 14 años empecé a bailar y encontré mi lado femenino”.

¿Cuándo se dieron esos primeros pasos de baile?
“Es que mi hermano se puso a estudiar y me utilizaba a mí para armar la coreografía o para corregir o para que lo ayudara. Así fue aprendiendo y recuerdo que era muy vergonzosa, pero practicaba con él. Se recibe, pone la escuela y yo era una de sus alumnas y el baile, me sacó la vergüenza”.



¿Cuál es tu baile o danza favorita?
“Bailo árabe, bachata, rock, cumbia santafesina y colombiana, pero lo que más me gusta es la salsa. Tengo como referentes a Adrián y Anita, que son diez veces campeones del mundo. Ella es brasileña y él es paraguayo. Poseen su escuela en Los Ángeles y recorren todo el mundo”.

¿Cuántas horas al día entrenás?
“Entre las clases y lo que bailo, unas seis horas por día. En la pandemia, con menos alumnas por clases, estaba cerca de doce horas diarias. Yo lo hago porque me encanta y después, como muchísimo y de todo, porque tengo mucho desgaste”.

¿Competiste alguna vez?
“Muchas veces. Fuimos a bailar al Mundial de Miami con mi hermano en el año 2012 y 2013. Nos fue muy bien, terminamos en el noveno lugar, que fue un puesto excelente por la cantidad de parejas de todo el mundo que se presentaron”.

¿Qué hacés cuándo no bailás, teniendo en cuenta que tus días pasan por esa actividad?
“Me gusta mucho dormir y comer. Amo las golosinas y cosas dulces. Todas las noches, antes de irme a dormir me como un alfajor, me gustan los caramelos, las gomitas, todo, jajaja. Y dormir, lo hago los domingos nada más o alguna siesta si puedo”.