Ayer a la mañana el centro de la ciudad se vio convulsionado por una serie de protestas que confluyeron frente al Palacio Municipal. El grupo “Ni un pibe ni piba menos por la droga” realizó una mesa de diálogo en la esquina de la Municipalidad mientras que el grupo “Lazos que nos unen contra el cáncer” efectuó una concentración en el hospital para luego marchar también al Municipio contando con el apoyo del “Polo Obrero”.
Germán Rodríguez
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Una mañana convulsionada fue la que se vivió en el centro nicoleño cuando coincidieron dos protestas organizadas por diferentes agrupaciones sociales, como son “Ni un pibe ni piba menos por la droga” y “Lazos que nos unen contra el cáncer”. En primer lugar, a las 9.00, frente al Palacio Municipal se convocaron los jóvenes de la casa de acompañamiento comunitario de “Ni un pibe ni piba menos por la droga” que sostienen a nivel terapéutico las problemáticas del consumo de estupefacientes en los barrios. Este movimiento de lucha contra las adiciones había pactado para convocarse el martes 28 de junio, pero debido a condiciones climáticas lo pospusieron para ayer.
El motivo del encuentro fue que como el 26 de junio se celebra a nivel internacional la lucha contra el narcotráfico y los 28 de junio es el aniversario del movimiento, con seis años a nivel nacional, sirvió de disparador para convocar a distintas organizaciones de la ciudad, en la que estuvieron referentes de la “Juventud CCC”, “Jóvenes de pie”, JP, Evita, JCR, CTA y ATE con el objeto de armar una mesa multisectorial que trabaje los consumos en San Nicolás.
Desde la organización contaron que el pedido que se le hace al Municipio es poder sentarse a dialogar por un reglamento y una ley que aborde la emergencia en adicciones, que no solo se solicita a nivel nacional, sino que a nivel local es una gran problemática, que se refuercen los kits deportivos en los clubes de barrio y las organizaciones sociales, la reapertura del polideportivo de Garetto y campañas de prevención y formación de preventores en adicciones. Para evitar problemas la policía cortó el tránsito en la esquina de Rivadavia y De la Nación y en Pellegrini e Italia.
Desde el hospital
Asimismo, y a esa misma hora, el grupo “Lazos que nos unen contra el cáncer” convocó a una concentración en el Hospital San Felipe para marchar hacia el Palacio Municipal en reclamo por demoras de hasta tres meses en turnos de atención, resultados de biopsias y Pap, falta de insumos y medicamentos. Los pacientes oncológicos solicitan la creación de un equipo interdisciplinario de profesionales para tratar el cáncer, equipamientos para los estudios, resultados a tiempo y turnos disponibles. Esta agrupación estuvo fuertemente apoyada por el Polo Obrero llegando a sumar más de 500 personas que realizaron una larga caminata desde el nosocomio por calle Mitre hasta Sarmiento y de ahí a Rivadavia y Pellegrini en la esquina del Palacio Municipal donde se encontraron con la otra convocatoria mencionada.
Allí los dos movimientos de forma organizada se distribuyeron y a pesar de las bajas temperaturas convocaron a una impresionante cantidad de gente. Ya en la esquina, los organizadores de la convocatoria reclamaron por la falta de diagnóstico y tratamiento de los pacientes de cáncer denunciando que aquellos de bajos recursos no reciben ningún tipo de ayuda. “Los tratamientos son costosos e incluyen radiografías, radioterapia, quimioterapia, cocteles de comprimidos, nadie es culpable de esta patología, pero sí acusamos a los de arriba que miran para otro lado y no les importa la vida de las personas”, expresaron en el encuentro.
Adicciones
En diálogo con EL NORTE, Lourdes Debito, referente del movimiento “Ni un pibe menos por la droga en San Nicolás”, quienes primero se convocaron frente al Municipio, comentó sobre la labor que realizan desde la casa de acompañamiento y las necesidades de la misma.
“Trabajamos la problemática del consumo como otra pandemia posterior al covid. La droga está en todos los sectores, pero sobre todo en los más vulnerables, y es una puerta de entrada a un montón de otras cosas. El pibe no solo la pasa mal por las adicciones, sino porque no tienen un plato de comida en la casa, no tiene un trabajo digno, porque no tiene un techo, porque no puede terminar la escuela, no tiene acceso a practicar deportes. La casa está abierta para todos y quien quiera acercarse a hacer un tratamiento lo puede hacer y le damos un espacio. Trabajamos en talleres divididos en distintas áreas, ya sea culturales, deportivos y de educación. Son todos libres, gratuitos y pueden acercarse quienes quieran participar. Tenemos un equipo terapéutico que consta de dos psicólogos y una psicóloga social que son los que se ocupan de los problemas de consumo y después tenemos talleristas que están preparados en la línea del movimiento, que es la de prevención y promoción, por ejemplo, en deportes como el hockey femenino, kickboxing y pronto el fútbol. Tenemos a nivel cultural un taller de rimas y freestyle con un taller de grabación para que los pibes que empiezan a trabajar puedan hacerlo, y talleres de oficios. Esto es subsidiado por Sedronar, que es la secretaria de drogas a nivel nacional”, expresó.