Con un dólar en constante crecimiento, cambios en el gabinete y una inflación sin fin, el ciudadano se encuentra en un momento de desconcierto en relación con la economía. Ariel Colombo, contador público con amplio reconocimiento en nuestra ciudad, brindó su opinión acerca de la situación monetaria y política de nuestro país dando una serie de consejos a los nicoleños respecto a cómo invertir en esta época de incertidumbre.
Germán Rodríguez
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El panorama económico es de incertidumbre, miedo a los mercados, al dólar, a la inflación y, por supuesto, a la pérdida del poder adquisitivo y los ahorros. El cambio en el Ministerio de Economía plantea muchas incógnitas a los nicoleños que no saben qué hacer con el dinero. En diálogo con EL NORTE, el contador nacional Ariel Colombo, un reconocido profesional de nuestra ciudad, se refirió a la situación actual, dejando algunas pautas de lo que se puede hacer en estos momentos inciertos.
“Básicamente lo que yo creo que está ocurriendo es que estamos en un estado que tiene un déficit en sus cuentas públicas muy importante, lo que lleva a que el valor de la moneda, que es el peso, cada vez valga menos. Lamentablemente el empresario no puede trabajar porque no sabe a qué precio vender, no tiene previsibilidad en el futuro para hacer inversiones y la gente común ve que le rinde cada vez menos el dinero”, expresó respecto a la actualidad en la calle. “Hoy en día, con un 50% de pobres y un nivel de desocupación importante, el mercado interno no tiene la fuerza para mover toda la actividad que podría tener nuestro país. Son una serie de cuestiones que se originan en el déficit del Estado, en las cuentas públicas, y ocasiona toda la situación económica que tenemos, que no viene de este Gobierno, sino que es algo histórico de la Argentina. Siempre el Estado gastó más de lo que ingresa, es algo crónico que tenemos. Pero esto no se inicia con esta gestión, viene de décadas de inconvenientes”, aclaró sobre un mal endémico de la economía argentina.
Desfasaje
Respecto al desfasaje en la balanza comercial argentina explicó: “Los dólares la única forma genuina de conseguirlos es vendiendo más de lo que compró al exterior. Esa diferencia de exportaciones e importaciones es clave, si yo exporto más de lo que importo, te da una balanza positiva de comercio exterior e ingresa genuinamente dinero en dólares. También puede ingresar dólares con préstamos, pero no es genuina. Nuestro país tiene una raíz productiva donde se dice que entre el 70 y 80% del componente de cualquier bien que se produce en nuestro país es importado, eso sumado al problema energético, que nosotros somos importadores de energía, nos da que cuando comienza la actividad a generar mayor volumen de producción, a su vez se genera una mayor demanda de importaciones. Nuestra matriz productiva es muy dependiente de productos del exterior, entonces cuando el mercado interno se empieza a mover, automáticamente aumentan las importaciones de combustible. El combustible junto con los cereales es lo que más aumentó por el contexto internacional, pero no estamos viendo la diferencia. Los cereales que vendemos nosotros se están yendo a valores que hace mucho tiempo no tenían, pero no vemos ese rendimiento positivo porque estamos comprando mucha energía. Ahí viene el conflicto que se filtró este mes con el famoso gasoducto Néstor Kirchner, ya que si estaría terminado, la balanza comercial sería positiva y no estaríamos en la situación que estamos ahora”
Dólar
El lunes con la asunción de la nueva ministra de Economía se produjo una importante disparada del dólar. Sobre este aumento y su repercusión en la economía argentina dijo: “La disparada del dólar, como cualquier otro bien, es una cuestión de oferta y demanda. Hay mucha gente que demanda el billete y está dispuesto a pagar un precio mayor al que está en el mercado. Pero el dólar va de la mano de nuestra moneda. El dólar es un bien como un auto o un kilo de carne, es un bien transable que se puede comerciar. Yo voy con el peso, que ante el dólar tiene una equivalencia al dólar oficial de 120, por ejemplo, pero si en dos meses yo quiero comprar el mismo dólar y mi moneda vale menos porque hay cada vez más moneda en el mercado, se encarece. Cada vez que hay más de un bien el valor unitario baja respecto a la oferta y demanda. Si yo tengo un solo peso en el mercado y nadie lo quiere, eso no tiene valor, ahora si hay un solo peso y mucha gente lo quiere, el valor va a subir y si yo genero un peso más y la demanda es alta, seguirá teniendo un valor alto. Todo es cuestión de oferta y demanda en un principio. Hemos visto muchas veces que el dólar contra el real se devalúa y ¿por qué en Argentina sube? Es porque nuestra moneda tiene cada vez menos valor, no solo contra el dólar, sino contra cualquier otro bien. Cuando decimos que aumentó el kilo de carne bien podríamos decir que la moneda se depreció contra el kilo de carne. Si hoy tomamos el aumento del dólar en los últimos diez meses comparando a cómo fue la inflación, veremos que seguramente el dólar aumentó menos. La Argentina está entre los países con más inflación en el mundo sin estar en conflictos bélicos”.
Consejos
Acerca de qué se puede hacer ahora con el dinero en este contexto inflacionario, expresó: “Hay que ver la situación de cada uno. El primer consejo que le hago a la gente es adelantar compras, si alguien tiene un sobrante y puede comprar alimentos e ir a un mayorista, es bueno comprar grandes cantidades, comprar más de lo que va a consumir y guardarlo porque eso en una semana va a valer más caro. Segundo, si alguien tiene que comprar un bien durable, dígase una cocina, una heladera, que lo compre ya porque va a salir más caro. El que tiene que consumir algo, que sí o sí lo va a hacer, que lo compre urgente. Otro tema, el que pueda ahorrar, siempre va en virtud de qué dinero estamos hablando. Yo en este momento, sin saber bien lo que va a pasar, trataría de posicionarme en un bien que no pierda valor, si puedo comprar dólares para estar tranquilo, aunque quizás pierda porque la inflación sigue y el dólar no aumenta tanto, lo haría”.
Sobre si comprar “ladrillos” es una buena opción, en este contexto nacional lo descartó: “Respecto a la inversión en inmuebles, en estos últimos años no es una buena inversión porque si lo comprás para alquilar, hoy en día el alquiler no es una buena rentabilidad; si lo comprás o construís para vender en un país donde no hay crédito hipotecario, es difícil vender un inmueble. Quizás vender un terreno es más fácil que una casa construida. Hoy el tema de los inmuebles no lo veo como una inversión positiva”, dijo.
Y agregó: “Hay inversiones más sofisticadas que se necesita de un asesor en inversiones, como acciones o títulos en dólares que pueden ser una buena inversión, pero sabiendo que el mundo está muy raro y hay inflación en gran parte del mismo, aunque la nuestra es superior, es peligroso. Está subiendo la tasa de interés en los Estados Unidos y la última vez que eso sucedió fue en los ochenta, y hubo una recesión a nivel mundial por muchos años. No se sabe bien lo que puede pasar, es momento de hacer inversiones defensivas, para no perder tanto, pero no es momento para arriesgarse a tratar de ganar, porque no se sabe qué va a pasar. Ni los grandes empresarios lo saben. La situación no es buena y aunque haya cambiado el ministro de Economía, no creo que lo que se ha venido haciendo hasta ahora varíe mucho ni creo que se vean muchos cambios. Pienso que habrá más controles de precios, se vigilará el dólar, se distribuirá dinero en virtud de programas. El concepto de este Gobierno es distribuir el dinero que se pueda recaudar sin importar la inflación, pero no espero muchos cambios”.