El miércoles 2 de marzo, la víctima de la violación de Palermo habló frente a la Justicia a dos días del ataque. La joven de 20 años se sentó frente al fiscal Eduardo Rosende y el juez Marcos Fernández. Allí, les contó lo que recordaba sobre lo que había sufrido a bordo de un Volkswagen Gol blanco en la calle Serrano.
En su testimonio, que duró cerca de una hora, relató de qué manera conoció a los seis detenidos y qué hicieron en las horas previas al abuso. Pero además contó que antes del hecho existieron cuatro testigos, dos hombres y dos mujeres, que estuvieron con el grupo. ¿Quiénes son? La Justicia todavía no pudo identificarlos y los busca para que den sus testimonios, que pueden convertirse en una pieza fundamental.
Uno de los acusados, Tomás Domínguez, a través de su abogado Jorge Alfonso, presentó en la mañana del lunes un pedido de excarcelación. Domínguez es visto en videos de cámaras de seguridad mientras toca a la víctima, con roces de su mano sobre su zona genital, con la ropa puesta.
La víctima contó que la noche anterior al día del hecho estuvo en la casa de un amigo llamado T. en la zona de San Fernando. Allí estuvieron hasta que decidieron ir a Palermo para continuar la noche. “Vinimos a bailar a ‘Ro Techno Bar’ que es un boliche que está en Thames y otra calle que no recuerdo, en Capital. Llegamos y me puse a bailar, estaba bien”, comenzó relatando la víctima. Además aclaro que llegó al boliche a las 5:08, según lo que figura en el recibo del auto de aplicación que tomó. “Recuerdo que había tomado alcohol, no recuerdo la cantidad. Lo de siempre. Nunca había tenido problemas con el alcohol… Recuerdo perfectamente que estaba bailando con mi amigo”, siguió.
Luego la joven develó una de las incógnitas que tenía la investigación. Relató dónde conoció a los detenidos. “En un momento, dentro del boliche, tengo un acercamiento, de hablar, como es habitual con cinco chicos. Inclusive estaba también mi amigo T. Me acuerdo perfectamente de sus rostros. También sé que coinciden con las personas que están identificadas y acusadas”, afirmó.
Incluso pudo realizar una descripción, con lo que se acordaba de esos hombres. Aseguró que “dos tenían rastas”. “Uno las tenía largas y el otro cortas”, detalló. El de las rastas cortas sería Tomás Domínguez. Remarcó, también, la presencia de “uno con flequillito y pelo largo por los hombros, alto”. Luego completó con otra descripción: “Había uno morocho, de tez morena, con el pelo cortito, rapado”.
Las características que narró la joven concuerdan perfectamente con cuatro de los detenidos: Ignacio Retondo, Lautaro Ciongo Pasotti, Fabián Tomás Domínguez y Ángel Ramos. Sobre el quinto del grupo que estaba en ese momento no pudo recordar ningún dato.
El relato continúa en orden cronológico. La víctima explicó qué pasó cuando se fueron del boliche, cerca de las 8. “Salimos del boliche, todos. Inclusive mi amigo T. Había mucha más gente porque el boliche estaba cerrando. Con nosotros salieron una chica y un varón más que estaba con ella. La chica me dijo que trabajaba en un bar cerca de ahí y que era amiga de otra chica con la que también había hablado esa noche”, siguió. Allí, fueron “para la plaza de Soler”.
Esta parte de la declaración fue de sumo interés tanto para el fiscal Rosende como para el juez Fernández porque la mujer introduce más personas que estuvieron en contacto, evidentemente, con ella y con los ahora imputados. ¿Quiénes son ese hombre y esa mujer? La víctima aportó sus descripciones pero aun no fueron individualizados.
“Recuerdo que tomé cerveza en la plaza. Les di plata a los que estaban ahí, no me acuerdo quienes, para que vayan a comprar. Estoy segura que a alguno del grupo de los seis. Sé que trajeron cerveza y que tomé, creo que de una de las latas que trajeron”, contó la chica de 20 años. ¿En alguna de esas latas podría estar la posible sustancia que la llevó a la disminución de sus capacidades, con la que fue presuntamente drogada para ser abusada? Es algo que la investigación aún no develó.
Luego, de acuerdo a su relato, se sumaron otro hombre y otra mujer al grupo. “Llegó la otra chica que era amiga de la que ya estaba junto con un varón”, dijo. Se trata de otras dos personas que la Justicia intenta encontrar para que hablen y cuenten lo que vieron, mientras estuvieron en esa plaza junto a los atacantes y la víctima. La madre de la víctima habría hecho sus propias averiguaciones, con una posible identificación del hombre.
El relato de la joven llega hasta ahí. Luego, su memoria está en blanco. “A partir de lo de la plaza no me acuerdo más nada hasta que me encuentro en el hospital, con la policía al lado”, dijo.
Cuando llegó el momento de las preguntas, el fiscal Rosende quiso saber de qué manera o en qué momento se había incorporado al grupo la sexta persona, ya que la víctima había mencionado a cinco dentro del boliche. “Probablemente se haya sumado también en la plaza”.
Por las descripciones realizadas antes, el sexto acusado, que se incorporó en la plaza, pudo haber sido Franco Lykan o Alexis Cuzzoni.
A raíz de diversas preguntas de la fiscalía, la víctima realizó una descripción, ya no individual y física, sino del grupo en general: “Parecían todos amigos, por lo que recuerdo. Eran uno más vivo que el otro, rápidos mentalmente. No recuerdo qué decían pero tengo esa sensación. No parecían fuera de sí, en el sentido de sustancias, alcohol o drogas. Parecían conscientes, sino me hubiese dado miedo por ser mujer y estar sola”, afirmó. También contó lo que sintió las horas posteriores al abuso sexual: “Estoy con mucho miedo, terror. Por el abuso sexual tengo un dolor en la zona abdominal y mucha angustia”.
Este testimonio fue el puntapié inicial de la investigación que ahora espera el resultado de pericias claves Por un lado los exámenes toxicológicos tanto a víctima como a victimarios. También lo que arroje la pericia de ADN. “Eso será fundamental para empezar a determinar los roles de cada uno de los imputados en el abuso”, afirma una fuente del caso.
Por su parte, los seis detenidos no comparten más el mismo abogado. El doctor Jorge Alfonso y su colega Silvina Fernández Rosarno son los encargados de ejecutar la estrategia defensiva de uno sólo: Tomás Domínguez. Esta mañana, a primera hora, ingresó al juzgado su pedido de excarcelación. Los letrados consideran que no existen riegos procesales. Los otros cinco acusados tendrán, por el momento, letrado oficial.
Todos los detenidos siguen alojados en distintas comisarías de la Ciudad y allí se quedarán por los próximos días.