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viernes, enero 10, 2025
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La UOM advierte que la producción en Ternium “tocó piso” en diciembre

INDUSTRIA EN CRISIS

La planta General Savio tuvo una producción de 125.000 toneladas en el último mes de 2024, según informó Edgardo Holstein. En octubre y noviembre había sido de 140.000 toneladas. “En 2022 andábamos en las 180.000 toneladas”, explicó el secretario adjunto de la UOM San Nicolás. Preocupación por lo que pueda pasar a partir de marzo.

De la redacción de EL NORTE
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La industria siderúrgica atraviesa un momento delicado. Muestra de ello es el panorama productivo en la planta de Ternium Argentina, motor de la economía de San Nicolás y la región. “En diciembre tocamos el piso, con una producción de 125.000 toneladas mensuales, cuando el promedio acá son 180.000”, explicó el secretario adjunto de la UOM local, Edgardo Holstein. En octubre y noviembre la producción fue de 140.000, y ese número ya generaba preocupación.

A la competencia de Brasil y China, se suma ahora el aumento de los insumos por la exportación de chatarra. Obviamente, este escenario enciende las alarmas vinculadas a la situación de empleo en la planta General Savio.

“Pudimos evitar los despidos”, comentó Holstein, en referencia a una reestructuración para bajar costos que había anunciado la empresa. “El acuerdo fue que no se contraten los refuerzos temporarios que cubren las vacaciones cada verano. Con eso y la redistribución del personal en distintas áreas logramos postergar esa discusión hasta marzo, con todos adentro”, explica. “A la vez, sigue abierto el programa de retiros voluntarios de la empresa”.

Pero no son muchos los que aceptan esa propuesta, puesto que la expectativa de conseguir otro empleo o desarrollar una actividad rentable, en este contexto, es casi nula. Los pocos que se adhieren están a pocos años de jubilarse y por eso la ven como una buena opción, una manera de anticiparse.

Las causas de la crisis del sector son múltiples. Holstein da cuenta de un combo letal. “Por un lado, la recesión hace que caigan los pedidos, porque las industrias demandan menos; por otro, el dólar caro nos quita competitividad frente a Brasil”. “Prácticamente volvieron los noventa”, concluyó Holstein.