La problemática de los basurales a cielo abierto sigue sin resolverse en grandes partes de la provincia. San Nicolás es una ciudad con muchos microbasurales en los distintos barrios que se forman porque vecinos o empresas arrojan desechos en descampados o en inmediaciones de las vías del tren. En diálogo con EL NORTE, la ministra de Ambiente de la provincia de Buenos Aires, Daniela Vilar, sostuvo que están trabajando “para abordar la problemática pero de manera integral”.
De la Redacción de EL NORTE
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San Nicolás tiene un problema que no se ha resuelto y que, lamentablemente, continúa en constante crecimiento. Se trata de los basurales a cielo abierto, los cuales se han formado en varios puntos de la ciudad, aunque principalmente en el sur y el oeste. Incluso, en esta última zona, se ha empezado a formar uno nuevo, por Av. Alberdi.
Cercano a lo que es barrio San Francisco, enfrente, donde hay un descampado, un cartel del Municipio esgrime que “queda prohibido arrojar basura”. Sin embargo, ya ni las advertencias son suficientes porque es allí donde va creciendo un sinfín de desechos.
Por alguna razón, vecinos de los lugares afectados han tomado la mala costumbre de arrojar sus desechos en descampados, terrenos baldíos o basurales de muchos años. Sin embargo, en la recorrida que EL NORTE realizó para constatar sobre el crecimiento de este problema, nicoleños aledaños a los basurales en cuestión manifestaron haber visto “gente que viene y tira basura” pero que no viven ni siquiera cerca.
Daniela Vilar en diálogo con EL NORTE
Tras la visita de la ministra de Ambiente de la provincia de Buenos Aires, Daniela Vilar, EL NORTE consultó sobre las políticas públicas o acciones que están realizando y que piensan tomar de cara a resolver dicho problema. Más que nada, teniendo en cuenta el hartazgo del vecino y el miedo por posibles contagios.
“Creo que es bueno recordar que el Ministerio se crea a fines del 2021 por decisión del gobernador Axel Kicillof. Es decir, llevamos muy poco tiempo de gestión, todavía no llegamos a los dos años. Sin embargo, ya empezamos a tomar decisiones que ayudan a resolver esta problemática que tienen muchos distritos de nuestra provincia”, manifestó Daniela Vila.
“Hasta ahora, no se había creado el mapa GIRSU en territorio bonaerense. Estamos trabajando en estos momentos en ese mapa con la idea de dejarlo como insumo para poder crear políticas públicas. Es muy difícil trabajar sin base de datos, por eso empezamos generando ese diagnóstico”, expresó la funcionaria de la provincia.
De inmediato, agregó que “no obstante, hoy 81 de los 135 municipios de la provincia tiene su lugar de disposición final en un basural a cielo abierto. Para nosotros eso es una problemática gravísima, no solo en términos de impacto ambiental. Ver un basural no es agradable, tiene impacto en la salud, por supuesto, pero fundamentalmente tiene un impacto en la calidad de vida de las comunidades que tienen que vivir en torno a esos basurales para sostener su alimentación”.
A su vez enfatizó: “Si hay un basural, hay gente revolviendo esa basura tratando de sacar el material reciclable para poder venderlo. Ese diagnóstico existe, hoy estamos trabajando en los diez grandes basurales que tiene la provincia, tanto en el saneamiento como en la erradicación y la construcción de un relleno”.
En San Nicolás
En nuestra ciudad, hay un relleno sanitario que es considerado “modelo” en otros distritos, con un sistema de recolección de residuos que llega a los barrios donde está la principal problemática de microbasurales. Por tal motivo, no se entiende cómo es que se forman con tanta facilidad.
“Por más que haya relleno sanitario, por más que haya empresas que se dediquen a la recolección de residuos, puede haber un montón de cosas que intenten llevar adelante una gestión de residuos sólidos urbanos. Pero si no hay humanidad, si no se entiende que ahí también hay gente, que eso puede generar trabajo, que tiene impactos negativos en la población, y no se configura desde una mirada integral, por ejemplo, educación ambiental y concientización, con la creación de una planta de reciclaje con trabajadores siendo parte de ese sistema (en San Nicolás sí hay), recolección diferenciada de residuos (también hay), entonces todo lo demás son parches que no solucionan de fondo la problemática”, afirmó Vilar.
“Fundamentalmente, un basural tiene un impacto en la calidad de vida de las comunidades que tienen que vivir en torno a esos basurales para sostener su alimentación”.
Daniela Vilar, ministra de Ambiente de la provincia de Buenos Aires
Entonces, si nuestra ciudad tiene todo lo que explica la ministra, por qué sigue habiendo basurales a cielo abierto. “Las enfermedades que pueden generarse son terribles, es uno de los peores diagnósticos que nos encontramos en un barrio donde hay un basural a cielo abierto. Pero el abordaje tiene que ser integral en términos de políticas públicas y en términos de compromiso también. Necesitamos de un compromiso de la comunidad, del Municipio y en coordinación con la provincia”, expresó la ministra.
Multas
Desde ya, rigen en nuestra ciudad contravenciones para quienes sean responsables de tirar la basura donde no corresponde. Según pudo saber este medio, se trata de una de las denuncias más recurrente en el 147 el año pasado. Desde el Juzgado de Convivencia y Faltas, piden a las personas que denuncien, que traten de dar la mayor cantidad de información posible. Ya que es por la falta de responsables que no pueden aplicarse las penas accesorias y las multas económicas.
En relación con la penalización monetaria, el Código de Convivencia y Faltas estipula un valor de 10 a 2000 módulos. Con el módulo a un valor de $670,67 las multas escalarían desde los $6706,70 hasta los $1.341.340.