Muchas veces resultan víctimas de discriminación, estereotipos y estructuras por cuestión de género, de clase (son pobres) y etnia (pertenecen a pueblos originarios). Tienen un rol colectivo y comunitario integral como cuidadoras de los recursos naturales y guardianas del conocimiento, la defensa de las tierras y la reivindicación de sus derechos. En Posadas, abordaron las problemáticas comunes entre las que se encuentra la violencia naturalizada hacia ellas sobre todo en las zonas rurales.
De la Redacción de EL NORTE
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Con un pacto de unidad comunidades de todo el país finalizó el 15.º Encuentro de Naciones y Pueblos Originarios luego de tres días de debate, talleres y marchas en Posadas que tuvieron como espacio central el campus de la Universidad Nacional de Misiones (Unam). Más de 1000 personas de etnias de todo el país concluyeron el encuentro haciendo foco en la unidad entre las comunidades para seguir exigiendo derechos. En tanto, decidieron elevar una denuncia penal al Gobierno nacional por incumplimiento de la Ley 26.160, que tiene como objetivos dar respuesta a la situación de emergencia territorial de las comunidades indígenas del país, y que suspende la ejecución de sentencias cuyo objeto sea el desalojo o desocupación de las tierras. Por otra parte, exigirán que las instituciones educativas implementen las lenguas maternas de cada comunidad y que estas sean dictadas por personas nativas capacitadas. La jornada reunió a representantes de los pueblos atacamas, aymaras, chanés, charrúas, chorotes, chulupís, comechingones, diaguitas, guaraníes, guaycurúes, huarpes, logys, kollas, lules, mapuches, mocovíes, pilagás, ranqueles, quechuas, onas, qom y wichis, entre otros.
Las mujeres indígenas son víctimas de una situación de dominación y opresión no solo por una cuestión de género, sino también de clase (son pobres) y etnia (pertenecen a pueblos originarios). Igualmente, la violencia hacia las mujeres indígenas es uno de los temas urgentes a tratar. Según comentaron las presentes en el encuentro, es una cuestión naturalizada en las comunidades, sobre todo en las más rurales.
ROL COLECTIVO Y COMUNITARIO
Las mujeres indígenas tienen un rol colectivo y comunitario integral como cuidadoras de los recursos naturales y guardianas del conocimiento, la defensa de las tierras y la reivindicación de los derechos de los pueblos indígenas en todo el mundo. Los conocimientos en los pueblos son transmitidos por las mujeres mayores quienes son consideradas sabias dentro de las comunidades. Estas mujeres manejan conocimientos sobre salud, agricultura, cosmovisión indígena, espiritualidad, alimentos y tienen un rol muy importante para la transmisión del conocimiento cuando se trata de la formación de lideresas.
Liliana, de la comunidad rankülche Pillan Pullu We de La Pampa, contó en una entrevista con el diario El Territorio cómo las mujeres indígenas luchan por sus derechos. “Actualmente tenemos una lonko –significa ‘cacique’– que es Ayelén Morales. Ella es una mujer joven que recuperó nuestras raíces y es la que conformó. Ya tenemos personería jurídica, somos una comunidad urbana donde hemos tratado de rescatar toda nuestra ancestralidad a través de la cerámica, el tejido, las pinturas, la orfebrería y la madera”, sostuvo y notó: “El trabajo manual lleva mucho tiempo y la verdad que no es remunerado. Un poncho para tejer te lleva mucho tiempo. Un vestido nuestro lleva mucho tiempo hacerlo. Y por ahí no se le da el valor agregado del tiempo que uno le dedica desde que vas a buscar la arcilla al lugar, armás el jarro o la olla y la cocinás. Nosotros tenemos alonko que es la cocina ancestral”.
DUALIDAD
Asimismo, dijo que actualmente la lucha que llevan adelante refiere a la recuperación de territorios y que se respeten sus costumbres. Según relató, su abuela fue desplazada hace varios años, por eso luchan para que esas tierras puedan ser restituidas. Desde hace tiempo las mujeres rankülches tienen un rol protagonista no solo por la territorialidad, sino para recuperar costumbres, lengua materna y derechos laborales.
“Tenemos también un rol protagonista en el Encuentro Plurinacional de Mujeres y Diversidades. El año pasado participamos activamente con la lonko de la comunidad y nosotros apostamos a la dualidad. Esto significa que el hombre no es más que la mujer ni viceversa”, explicó la rankülche.
En La Pampa las mujeres pueden ser caciques en sus comunidades.
