Desde octubre de 2021, la hidrovía está siendo dragada en Ramallo a fin de poder agregar una ruta para los barcos que pasan por el río Paraná. Esto llamó la atención de muchas personas que decidieron involucrarse, principalmente organizaciones medioambientales. EL NORTE dialogó con Carlos del Frade, periodista y escritor, quien se pronunció acerca del inconveniente en cuestión y quien ya ha escrito sobre el particular debido a que sucede lo mismo con el tramo de Rosario.
De la Redacción de EL NORTE
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En la región, la vecina localidad de Ramallo es de las pocas que tiene acceso directo al río Paraná. Aprovechadas por ciudadanos y turistas, las playas ramallenses se llenan para poder ser disfrutadas. Esto podría perderse debido al dragado que se está realizando desde octubre de 2021, según manifiestan organizaciones medioambientales.
Pero es solo una de las tantas derivaciones que podría traer este particular. Días atrás, EL NORTE publicó las ocho consecuencias que enumeran vecinos autoconvocados y ambientalistas. En esta ocasión, dialogamos con el diputado provincial de Santa Fe por el Frente Social y Popular, periodista y escritor Carlos del Frade, quien lleva desarrollada una extensa trayectoria investigando los negociados de los dragados en las hidrovías. De hecho, en Rosario ya se sufren consecuencias que podrían verse en Ramallo.
“Acá hay dos cuestiones básicas: Necesitamos democratizar la democracia; y el tema de la ética pública, es decir, lo que es de todos debe ser cuidado por todos. El avance de la conciencia ecologista ha hecho que los derechos ambientales sean de cuarta generación, de interés colectivo. Por esto, ya no se puede utilizar el principio de la propiedad privada por encima de los bienes comunes. Tiene que haber participación de la ciudadanía”, manifestó Del Frade.
De inmediato, agregó que “todo derecho ambiental es un derecho colectivo y se está violentando ese derecho de la gente de Ramallo. Nadie consultó a sus ciudadanos sobre lo que se iba a hacer. Tampoco hay información pública al respecto; por ende, los dos principios básicos, a 38 años de democracia, no se verifican y esto hace que sea una democracia parcial”.
“Es imprescindible tener una planificación de Estado nacional, provincial y municipal sobre qué se quiere hacer con el río Paraná; qué tipo de planificación para el plazo inmediato y futuro, y resolver de quién es el Paraná. Ese es el otro problema, el Paraná no es de la empresa privada que tiene la explotación del dragado y balizamiento, es del pueblo argentino, lo mismo que los puertos”, explicó Del Frade.
Consecuencias y responsabilidades
La importancia de conocer el posible impacto que puede tener este “sobredragado”, es lo que se está exigiendo por parte de la población. En Rosario, por ejemplo, luego del dragado se desmoronó la barranca del Parque España. En Ramallo, temen que pase algo similar.
“Hay gente que puede quedar sin casa, hay ramallenses que pueden morir por los pozos que genera el dragado y hay comerciantes que seguramente terminen de bajar sus persianas para siempre”, añadieron ambientalistas a este diario.
En cuanto a las responsabilidades, Del Frade aseveró que “por Constitución Nacional, las provincias adquieren el derecho y la obligación de cuidar todo lo que tiene que ver con lo medioambiental. Por lo cual, el Gobierno de la provincia de Buenos Aires es el primer responsable y no puede mirar para otro lado”.
EL NORTE intentó comunicarse con el intendente de Ramallo, pero no hubo contestación alguna. Según ambientalistas, “la respuesta del Municipio fue que ellos no tienen jurisdicción alguna y que ya pidieron que pasen despacio por la zona cercana a nuestra playa, donde hay mucha gente”.