La actriz rememoró cómo fue el proceso de concebir con un donante y quiénes la ayudaron en el camino hacia la maternidad.
La actriz Juana Repetto rememoró cómo fue el proceso hacia la maternidad: la hija de Reina Reech y Nicolás Repetto eligió ser madre soltera en 2016 y ese mismo año nació su primer hijo, Toribio.
“Cuando nació Toro -Toribio-, tenía muy idealizada la maternidad, como que era el gran sueño de mi vida y demás”, explicó la actriz y reveló que el proceso fue totalmente distinto luego de, incluso, haberse informado al respecto: “Me empecé a sentir muy mal emocionalmente”.
Si bien, Repetto cumplía “el sueño de su vida”, acababa de dar a luz “al hijo que deseó toda la vida con una conexión excelente y estaba todo bien”, reveló que “emocionalmente estaba mal”.
“Por suerte tenía un grupo de madres, una red que” la ayudaron a comprender que “era normal y a las demás también les pasaba”. En ese sentido, Juana consideró la necesidad de compartir sus dudas sobre la maternidad: “Celebro que se hable, es re importante porque sino una se siente rara”, enfatizó.
Cuando comunicó que decidió ser madre soltera, estuvo acompañada por Sofía Gala, quien se había separado recientemente de Julián Della Paolera, el padre de su hijo Dante. En 2016, la actriz aún estaba en duda de concebir y, según cuenta, Gala la incentivo: “Me dijo ‘hacelo, dale mandale’, así que me puse a averiguar e impulsivamente llegué al tratamiento”.
Sin embargo, remarcó que “era una decisión que tenía muy resuelta internamente, desde antes. Desde siempre quise ser madre y fue mi deseo más grande de mi vida y la decisión más correcta sin dudas”.
Actualmente, Juana tiene dos hijos, Toribio de ocho años y Belisario (junto a su segundo marido Sebastián Graviotto) de tres años.