El jefe de Gobierno se refirió a la inseguridad en la provincia de Buenos Aires y cómo afecta esto a la Ciudad.
El jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, informó que entre enero y febrero de este año la Policía de la Ciudad tuvo “42 enfrentamientos” de los cuales 37 sucedieron en la provincia de Buenos Aires con efectivos “yendo y viniendo de su trabajo”.
“Entre enero y febrero de este año la Policía de la Ciudad tuvo 42 enfrentamientos armados, pero 37 ocurrieron en la provincia de Buenos Aires, con efectivos yendo y viniendo de su trabajo. Es un 42% más de enfrentamientos que en el mismo período del año pasado. Si esa es la medida del aumento del delito en la provincia de Buenos Aires es tremendo”, indicó.
En una entrevista para el programa “El Diario de Leuco”, en LN+, agregó: “La Policía de la Ciudad tiene 11 caídos en cumplimiento del servicio, pero solo uno fallecido en la Ciudad de Buenos Aires y 10 en Provincia. Hoy tuvimos un enfrentamiento de un policía de la Ciudad en su casa en La Matanza, por ejemplo”.
“¿Cuál es el límite al que te tenés que exponer cuando alguien ya viene con un arma? Nos están matando a los policías en el ir y venir de su trabajo porque dan a conocer que son policías. Cuando saben que son policías, los delincuentes tiran más rápido. Hay un tema de leyes que tenemos que rever”, aseveró.
También se refirió al narcomenudeo: “En la provincia de Buenos Aires no se quiere dar la discusión del narcomenudeo. Por ejemplo, lo de Los Monos, en Rosario, es narcomenudeo. El narcomenudeo que vemos en provincia de Buenos Aires nos afecta a nosotros. En la Ciudad, en 100 días hemos levantado cinco búnkers, el último en Constitución”.
Por último, hizo mención a los detenidos en las comisarías de la Ciudad: “Ya hemos detenido a 6.000 delincuentes, y eso que no tenemos el reconocimiento facial, que opera sobre la base de datos de delincuentes prófugos y peligrosos, y estamos cerca de volver a implementarlo. Hay 2.005 delincuentes detenidos en las comisarías y alcaidías, de un máximo de 900. Le estamos pidiendo al Gobierno nacional un mayor esfuerzo, porque además hay 1.700 policías distraídos en comisarías y alcaidías. Es un riesgo para el barrio y un peligro para el detenido”.