Tras ser campeón con la Reserva de Vélez, Jonathan Berón fue cedido a préstamo a Defensa y Justicia a mitad de año para buscar sus primeros minutos en Primera. Lo consiguió en pocos días, y le sumó también su debut a nivel internacional y su primer gol, que se dio días atrás en cancha de Lanús. “Estoy muy feliz por todo lo que me está pasando”, expresó el delantero nicoleño.
EZEQUIEL GUISONE
[email protected]
Jonathan Berón se fue a los 10 años de San Nicolás a Talleres de Córdoba, en busca de un sueño en aquel momento lejano. No la pasó nada bien, sufrió el desarraigo y volvió a la ciudad tres años más tarde con serias intenciones de dejar el fútbol. Hasta que Vélez apareció en su camino y le devolvió las ganas de ir una vez más por ese sueño de ser profesional.
Seis años en las inferiores del Fortín lo pusieron en plena carrera y lo llevaron a firmar su primer contrato. Comenzó a entrenar con la Primera división y hasta fue al banco de suplentes en Santa Fe ante Unión. Sin embargo, el debut con la camiseta de la V azulada no pudo ser.
“Yo en Vélez ya estaba entrenando con el primer equipo, pero obviamente no es lo mismo entrenar que jugar. También me sirvieron mucho los entrenamientos, el hecho de estar ahí, la intensidad, el clima, todo es muy lindo”, contó el nicoleño de 21 años, en una entrevista radial que brindó en La Deportiva, por Radio U 89.9. “La posibilidad de debutar en Primera siempre estuvo, pero por una cosa o por la otra la oportunidad no se me daba. Después llegó un nuevo técnico y prefirió que yo me fuera a préstamo. Me duele porque me hubiese encantado sumar minutos y debutar en Primera con la camiseta de Vélez, que es como mi casa, mi familia, porque estuvieron conmigo, me apoyaron siempre, y me ayudaron mucho con mi familia y con mi hija”, reconoció.
Un Halcón
A mitad de este año apareció Defensa y Justicia, con un DT que lo conocía bien de las inferiores de Vélez: Julio Vaccari. “Él fue el que me llamó, el que preguntó por mí. Ya nos conocíamos, y creo que eso fue un plus para tomar la decisión de venir a Defensa y Justicia, porque también tenía otros clubes interesados. Cuando lo tuve como DT en la Reserva me enseñó mucho, entonces creí que era el que más me podía ayudar para explotar mi juego. Entonces no lo dudé”, contó Jonathan.
Firmó contrato con el Halcón a préstamo hasta diciembre de 2024 con una opción de compra, y de inmediato se puso bajo las órdenes de Vaccari. A los pocos días, fue convocado para viajar a Ecuador para jugar con Emelec por Copa Sudamericana. “Vivir ese clima de copa internacional es hermoso, son experiencias únicas que todo jugador quiere vivir”, reconoció el nicoleño. “A mí me encanta ver esos momentos, con la gente local que te van a insultar y te hacen sentir importante”, contó entre risas. “Me pasó cuando fuimos a la altura el último partido que perdimos en Quito (0-3 vs. Liga). Yo nunca había jugado a nivel internacional y entré en ese partido. Fue una gran emoción sentir que estaba jugando una Copa en la altura, que no todos los jugadores han tenido esa experiencia. Y yo con tan solo 21 años estaba ahí. Son momentos hermosos, a pesar del resultado amargo”, recordó.
Defensa y Justicia no es un club más. Futbolistas como Nahuel Molina, Lisandro Martínez y Enzo Fernández vistieron esa camiseta con el mismo objetivo de sumar rodaje, y terminaron en lo más alto. “Son jugadores que hoy son campeones del mundo y que pasaron por acá. Es un club hermoso, muy bien organizado, muy familiar, con su gente siempre predispuesta a trabajar. Por eso cuando me dieron esta oportunidad de venir no lo dudé”, remarcó Jonathan, y contó que la adaptación fue rápida gracias a la buena predisposición del grupo y a un ex compañero de Vélez: Lucas Pratto. “Él había llegado dos semanas antes que yo y fue parte de mi adaptación, me incorporó al grupo. Yo ya tenía relación con él estando en Vélez, siempre me hablaba, me daba consejos, fue referente para mí. Y llegar a Defensa y que un jugador que ganó todo como Pratto te agregue al grupo me hizo sentir muy cómodo”.
Momento feliz
En plena rotación del equipo entre Sudamericana y Copa de la Liga, Jonathan Berón tuvo su debut en Primera siendo titular el 27 de agosto frente a Platense. Y el sábado 7 de este mes, en su sexta participación en la máxima categoría, se dio el gusto de marcar su primer gol: ingresó desde el banco a los 29 minutos del complemento, y a los 31 aprovechó la presión Togni sobre Aguerre para poner el 1 a 0 sobre Lanús, por la octava fecha del torneo. Diez minutos más tarde, inició la jugada y habilitó a Solari para el 2-0. Sueño hecho realidad. “Estoy re feliz por el momento que estoy viviendo, muy contento por cómo se dio el partido, por la situación, por el gol, por todo”, expresó el nicoleño.
“El gol y todos los logros que he ido consiguiendo siempre son dedicados para mi familia, que estuvieron desde un principio, desde cuando no me conocía nadie. Ellos estuvieron ahí apoyándome, brindándome siempre todo y un poquito más. Yo de muy chico me fui de mi casa y siempre me apoyaron en las decisiones que tomaba. Y también todo esto es para mi hija, que la tengo lejos, y creo que es parte muy importante de lo que hoy me está pasando”, dijo.
A cinco fechas del final del torneo, Defensa pelea por la clasificación en la zona B y se ilusiona con ir por el título. “Nosotros nos preparamos para pelear todo lo que tengamos en juego. Como nos pasó con la Sudamericana, que tuvimos la mala suerte de quedar en la puerta (cayeron en semis ante Liga de Quito). Ya sabíamos que estamos en zona de Libertadores y teníamos que enforcarnos enseguida en la Liga, además de que todavía seguimos en pie en la copa Argentina (jugarán cuartos de final vs. Chaco For Ever). Llegar a Defensa y que todo sea competitivo es hermoso. Sentir un poco que el equipo nunca se relaja, siempre está preparado para pelear lo que venga, lo que sea, eso te potencia mucho más”, cerró Jonathan.