Fueron esclarecidos varios hechos de ciberestafas que habían sido denunciados por vecinos nicoleños. La oficina especializada en cibercrimen brindó detalles de las investigaciones en las que aparecen entre los presuntos autores presos de la UP3.
De la redacción de EL NORTE
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Las investigaciones originadas a raíz de varias denuncias de nicoleños sorprendidos en su buena fe llevaron a las autoridades a realizar varios allanamientos en San Nicolás, todos relacionados con la ciberdelincuencia. Las actuaciones estuvieron a cargo del Dr. Jorge Leveratto, agente fiscal de la UFI Nº 15 con competencia en la temática quien, como una de sus principales medidas, ordenó la intervención de la Secretaría Especializada en Cibercrimen y Evidencia Digital, que depende de la Fiscalía General, para que en acción conjunta se lograra identificar a los autores de los hechos allí denunciados.
En los tres delitos investigados las metodologías utilizadas por los individuos eran de diferente índole, pero todas ellas relacionadas con hechos delictivos cometidos a través de las nuevas tecnologías.
Las investigaciones
La primera investigación comenzó mediante la denuncia de un particular, quien manifestó que a pesar de tener en su poder todas sus tarjetas de débito y crédito, los datos de las mismas habían sido utilizados para efectuar compras e-commerce (a través de Internet) en diversos comercios y por altas sumas dinerarias.
De las pesquisas efectuadas durante los últimos días de diciembre del 2021, se logró detectar que en la maniobra se hallaban involucradas al menos dos personas, una de sexo masculino y otra de sexo femenino. La mujer sospechada fue detenida tras los allanamientos concretados en los domicilios de ambos sindicados, donde además se incautaron elementos de interés para la causa, principalmente telefonía celular. Luego de la recopilación de nuevos datos surgidos de la investigación, se estableció que la pareja de la imputada, un individuo que se encontraba detenido en la Unidad Penal III de San Nicolás, también sería partícipe en la maniobra delictiva investigada. Dicha banda que operaba de manera conjunta y mediante división de tareas, utilizaba VPN (Virtual Private Network, o red privada virtual), las cuales normalmente son usadas para navegación en Internet privada, pudiendo enmascarar o falsear el lugar desde donde en verdad la persona se está conectando, circunstancia que complicó pero no detuvo el accionar de los investigadores.
Por Facebook
En lo que respecta a la segunda modalidad, la investigación comenzó al tomarse conocimiento de la ocurrencia de varios hechos que se venían produciendo en la ciudad desde comienzos del año, cuando los delincuentes contactaban a través del Marketplace de la red social Facebook a sus víctimas (quienes tenían ofertados elementos y/o productos), para posteriormente generar un encuentro presencial en el cual luego de la exhibición de comprobantes apócrifos de transferencias bancarias, se llevaban consigo los elementos, y las víctimas nunca recibían el dinero acordado en sus cuentas bancarias. Luego de una minuciosa investigación, del análisis de telefonía celular utilizada por los delincuentes y mediante la utilización de redes de fuentes de datos abiertas (OSINT), lograron individualizar a otro interno alojado en la Unidad Penal III de San Nicolás, quien llevaría a cabo los llamados telefónicos contactando a las víctimas y a los demás partícipes (familiares del mismo), quienes actuarían fuera de dicha institución, yendo a retirar los producidos de las estafas realizadas para luego venderlos.
Por esta razón, y tras haber identificado que ciertos internos alojados en la Unidad Carcelaria de San Nicolás se hallarían efectuando las conductas antes detalladas, un grupo de agentes judiciales conformado por el coordinador de la Secretaría Especializada en Cibercrimen y Evidencia Digital, Dr. Julio Pérez Carretto, como así también personal de la misma dependencia, miembros de la Policía Judicial y de la Oficina Técnica (todos ellos dependientes de la Fiscalía General de San Nicolás), se trasladaron a la penitenciaría y tras efectuar varias requisas en los pabellones donde se encontraban alojados los sospechosos, procedieron al secuestro de diversos elementos que se hallaban en poder de los mismos.
Elementos secuestrados
Los elementos secuestrados fueron varios. En el caso de las estafas mediante el uso ilícito de información personal ajena, se incautó un teléfono celular y diversas anotaciones con datos de tarjetas (crédito y/o débito), tales como números de identificación, nombres y apellidos, códigos de seguridad, fechas de vencimiento, entre otros, que este sujeto detentaba en su poder.
En lo que respecta a la modalidad “Marketplace”, se secuestró el teléfono celular mediante el cual se contactaban en una primera instancia con las víctimas. Y luego en los allanamientos realizados en cada uno de los domicilios de los familiares de este último investigado, que fueron realizados por la División Departamental de Investigaciones de San Nicolás, lograron secuestrarse los teléfonos celulares que habrían sido utilizados en las maniobras delictivas. Los que serán analizados por la Oficina Técnica del Ministerio Público Fiscal y que contendrían valiosa información de interés para la causa.