A partir de las 13:00 la nueva playa municipal se encuentra a punto para recibir a todos los vecinos de la región. Las obras de refacción donde se ubica el histórico Tajamar se habían iniciado hacia fines de septiembre del año pasado.
De la redacción de EL NORTE
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En línea con el plan de recuperación y puesta en valor de los espacios públicos en la ciudad, esta vez será el turno del balneario de La Emilia. A tan sólo 11 kilómetros de San Nicolás, el nuevo espacio público ya se encuentra listo para ser aprovechado. Aunque la altura del arroyo no es la ideal ante la falta de precipitaciones en la región, hoy sábado a partir de las 13:00 quedará formalmente inaugurado.
Según había adelantado a este medio la directora de obras públicas municipal, Cecilia Giammaria, lo primordial de la obra balnearia era lograr un espacio natural, con mínimas intervenciones estructurales. Por ello, únicamente se procedió a disponer cartelería de señalización, cestos de basura, un poco de arena, algunas sombrillas y el sector propio para los guardavidas. En este sentido, la funcionaria había expresado: “El objetivo es tener un entorno agradable para estar sentado tomando mates. Que no haya actividades nocturnas, para no dejar abierta la posibilidad de que se rompan cosas y se arruine el espacio”.
Días, horarios y acceso
El balneario de La Emilia estará abierto exclusivamente los días sábados, domingos y feriados en el horario de 13:00 a 20:00. Sólo está permitido bañarse en presencia de guardavidas, y no se puede prender fuego ni acampar.
En cuanto al ingreso hacia el lugar, es peatonal. No se puede ingresar al espacio con vehículos, por lo que se deben estacionar en lugares propicios en cercanías al club o un poco más alejado por Av. Córdova en dirección hacia San Nicolás, y caminar 100 metros aproximadamente en dirección al balneario.
La obra
Desde la dirección de Obras, aseguraron que se llevó a cabo un importante trabajo hidráulico, por parte de la empresa D’almeida Bico Hnos S.A. La Emilia posee por un lado, el brazo original de Arroyo del Medio, y por el otro, un desvío que se construyó antiguamente para una represa. Este último, era el que se encontraba en muy mal estado por el paso del tiempo y demandaba de manera urgente su reparación: el históricamente reconocido ‘Tajamar’.
“Lo que se va a hacer es reconstruir el lomo de esa represa, para mantener así, las aguas calmas y un nivel del arroyo acorde para que la gente se pueda bañar, y estar en el entorno. Lo único que genera esa loza es un manejo hidráulico, porque tiene una compuerta que en ocasiones extremas se abre y en ocasiones de baja, se cierra. El agua corre igual pero a una velocidad que permite que las personas se puedan bañar”, explicaba Giammaria.