Los hermanos Menéndez, Erik y Lyle, fueron condenados en 1996 por el doble asesinato de sus padres.
Tras el éxito de la serie “MONSTRUOS” de Ryan Murphy en Netflix, centrada en el controvertido caso de los hermanos Lyle y Erik Menéndez, las autoridades han decidido reabrir su situación legal. La Fiscalía del Condado de Los Ángeles ha anunciado la revisión de nuevas pruebas que podrían alterar el resultado de uno de los casos más mediáticos de los años 80 y 90. Entre las pruebas hay una carta clave, presuntamente escrita por Erik Menéndez, en donde menciona que su padre lo agredió sexualmente.
Según informó el portal Variety, el fiscal de distrito de Los Ángeles, George Gascón, confirmó que se ha programado una nueva audiencia para los Menéndez el 29 de noviembre. Durante una conferencia de prensa, Gascón subrayó que, aunque no hay duda de que Lyle y Erik son responsables de los asesinatos de sus padres, su oficina revisará las nuevas pruebas para determinar si es necesaria una nueva sentencia.
Gascón también destacó que, si el caso ocurriera en la actualidad, manejarían las acusaciones de abuso sexual con mayor sensibilidad. “Si dictan una nueva sentencia, hay varias opciones en juego: podrían liberarlos, modificar la pena o incluso llevarlos a un nuevo juicio”, afirmó el fiscal.
A pesar de las nuevas pruebas presentadas, Gascón aclaró que no se ha tomado una decisión definitiva. Además que su oficina aún está en proceso de análisis. Este escenario deja abierta la posibilidad de modificar la sentencia actual de cadena perpetua, e incluso plantea la opción de un nuevo juicio. Los hermanos Menéndez admitieron haber cometido los asesinatos, pero alegaron que lo hicieron por miedo, debido a los abusos prolongados de su padre. En el juicio original, la fiscalía sostuvo que no existían pruebas suficientes de tales abusos. Y que los hermanos cometieron los crímenes motivados por el interés en la herencia de sus padres.
