La entidad que nuclea a las empresas de transporte público urbano y suburbano del interior del país, planteó en el Ministerio de Trabajo que la crisis que atraviesa el sector “amenaza severamente terminar la existencia” de las prestatarias. Para afrontar la pauta salarial exigida por la UTA, que ya anunció un paro por 48 horas, solicitan a Nación y las provincias compensaciones adicionales por $12 mil millones mensuales hasta fin de año.
Reunida con la entidad que representa a las empresas de transporte público de corta y media distancia del interior del país, la Unión Tranviarios Automotor (UTA) anunció un paro por 48 horas para esa porción del territorio nacional. De momento, San Nicolás y el interior bonaerense, donde el paro del martes pasado finalmente no se concretó, están alcanzados por esa amenaza. Así lo indicó a EL NORTE el secretario general de la seccional local del gremio de los colectiveros.
Tal como ya lo consignó este medio, la audiencia -esta vez en modo presencial- se había desarrollado el miércoles en el Ministerio de Trabajo de la Nación. La UTA estuvo representada por su secretario nacional, Roberto Fernández, y el adjunto, Jorge Kiener. Y por la FATAP asistieron su presidente Gerardo Ingaramo, y representantes de tres empresas del interior: entre ellos, Lorena Vercelli, directora de Vercelli Hnos.
En ese encuentro, la entidad empresaria recordó que el Ministerio de Transporte de la Nación comprometió –mediante una resolución oficial– los fondos necesarios para que las empresas del AMBA (esto es, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y distritos del conurbano bonaerense) puedan hacer frente a la mejora salarial exigida por la UTA.
“Lamentablemente, el transporte del Interior del país no merece, hasta la fecha, la misma atención y preocupación por parte de esa cartera, dado que, al igual que los gobiernos provinciales y municipales, se encuentran nuevamente ausentes. En ese marco, la crisis del sector se agrava día tras día, profundizándose la descapitalización de las empresas prestadoras, que se encuentran sometidas a un proceso de deterioro que amenaza severamente con terminar su existencia como tales”, asentó la FATAP en el acta de la audiencia.
Más de $80 mil millones
Más allá de ese panorama descriptivo, la entidad incluyó pedidos puntuales. Solicitó, por ejemplo, a Transporte de la Nación que “declare la emergencia del transporte de pasajeros por colectivos urbano y suburbano del interior del país”.
La federación de empresas de transporte también remarcó que “para hacer frente a la pretensión salarial” de la UTA, requiere de “un aporte adicional de $12 mil millones”, sólo para los salarios de junio. Es decir, hasta fin de año más $80 mil millones.
Y propone que esos aportes provengan el 50% del Gobierno nacional y el 50% restante de los gobiernos provinciales, según corresponda en cada caso.
Aquí hay un primer punto de interés para San Nicolás y todo el interior bonaerense. El paro de UTA del martes, que en nuestra ciudad y en el resto de la provincia finalmente no se concretó, quedó desactivado justamente porque el Ministerio de Transporte bonaerense habría comprometido fondos para cubrir salarios incrementados.
Panorama incierto
Pero hasta el momento no existe un documento provincial que indique cuál es el acuerdo para el interior bonaerense. Todo lo que hay es una aseveración de la Secretaría del Interior de la Unión Tranviarios Automotor (UTA). Se trata del comunicado del gremio por el cual se informó oficialmente en la madrugada del martes que el paro anunciado horas atrás quedaba desactivado en el interior bonaerense. “El Ministro de Transporte de la provincia de Buenos Aires, Dr. Jorge D’Onofrio, se ha comprometido a realizar los aportes necesarios para alcanzar el incremento salarial en las empresas del interior de la provincia de Buenos Aires, en los mismos términos y en las mismas condiciones que las resueltas para el AMBA”, indicaba el gremio en aquel momento.
Pasadas 48 horas de aquello, Tomás Lencina, secretario general de la UTA en San Nicolás, no descartó que el paro de 48 horas lanzado para jueves y viernes de la semana que viene también tenga impacto en nuestra ciudad y el resto del interior provincial.
“Los nuevos acuerdos salariales todavía no se han firmado. Las empresas están haciendo oídos sordos y a su vez el Estado, que es parte del sistema de transporte tampoco se compromete: dicen que lo van a dar, pero no firman ningún papel. Ahí está trabada la discusión”, indicó el dirigente gremial nicoleño.
También conviene recordar que a diferencia del AMBA, donde se acordaron aumentos salariales, el paro de la UTA en el interior bonaerense se desactivó en el contexto de una extensión de la conciliación obligatoria impuesta por el Ministerio de Trabajo. Esa tregua forzada expira el próximo miércoles.
Ese mismo día, desde las 16:00 el gremio y la FATAP volverán a encontrarse en el Ministerio. De ahí que la entidad gremial haya dispuesto su medida de fuerza para jueves y viernes.