El frío complicó al Gobierno, que y exige cortar el servicio a algunas empresas. Se trata de esquemas “interrumpibles” que está previsto que puedan cancelarse por unos días. Los afectados serían GNC y algunas industrias, pero se teme que la situación se intensifique. El Energas envió una misiva de alerta a Litoral Gas, y otras empresas transportistas y distribuidoras del suministro.
De la redacción de EL NORTE
[email protected]
Con temperaturas que se creen que tocarán mínimos históricos para el mes en estos días, el Gobierno les mandó una carta a las empresas de la industria gasífera para ponerlas en alerta. Es un aviso ante una suba fuerte de la demanda, y les exige algunos detalles de cara a la operación de los próximos días.
La misiva tiene la firma Carlos Alberto Casares, interventor del Enargas, y tiene en copia al secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo. Está dirigida a las principales transportistas y distribuidoras de gas del país: TGN, TGS, Metrogas, Litoral Gas, Naturgy, Gas Nea, Gasnor, Camuzzi Gas Pampeana, Camuzzi Gas del Sur, Distribuidora de Gas del Centro, Distribuidora de Gas Cuyana y Redengas.
En el sector hablan de “imprevisión”, de falta de medidas e inversión y de que el frío “agarró al equipo energético mal parado”. “Ahorran y tienen superávit a fuerza de estos problemas”, dijeron en una de las empresas, visiblemente preocupados.
Lo cierto es que el Gasoducto Néstor Kirchner aún no está a funcionando a full: aporta 11 millones de m3, pero debería estar en los 24 millones diarios. En medio de eso, Cammesa salió a comprar barcos de combustibles líquidos por unos USD 400 millones a último momento y antes de los esperado. En conclusión, hasta que lleguen los barcos, hay que mantener los cortes.
Te puede interesar: https://www.diarioelnorte.com.ar/en-san-nicolas-por-ahora-no-hay-restricciones-para-cargar-gnc/
En general, el gas tiene dos tipos de demanda: ininterrumpible, que es la residencial; e interrumpible, básicamente, GNC y algunas industrias, que pueden ser contratos más baratos y se pueden cortar ante alguna circunstancia en la que se registren faltantes. En términos de cortes, primero se dan en estos esquemas interrumpibles, luego en la industria y finalmente —en la que sería una situación mucho más compleja—, a las usinas que utilizan gas natural para generar energía eléctrica. Se van decidiendo en función de la demanda residencial que, como se dijo, es prioritaria.