Por séptimo año consecutivo San Nicolás se prepara para alojar la destacada muestra agroindustrial. Del 5 al 8 de marzo, el campo posa su mirada en la ciudad y en los llamativos stands de las distintas firmas. Por esto último, EL NORTE dialogó con el arquitecto Pablo Guatelli, quién destacó la importancia de contar con un equipo local para diferentes tareas. “Nos viene dando muy buenos resultados”, subrayó.
De la redacción de EL NORTE
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Restan 15 días para el corte de cintas en Expoagro 2024, el evento agroindustrial que nuevamente desembarca en el predio ferial y autódromo de la ciudad. Justamente, a partir de hoy comienzan el último tramo de preparativos -prácticamente a contrarreloj- con los detalles y puesta en escena de los stands utilizados por los expositores. Empero, el trabajo para estas fechas no comienza en el mes de febrero, ya que en algunos casos las tareas arrancaron desde octubre del año pasado. Principalmente en aquellos lotes que conviven cultivos con estructuras enormes. Esto último representa un reto para los expertos de la arquitectura no solo por los volúmenes, sino también por el impredecible factor climático. “Nos va desafiando año tras año”, aseguró Pablo Guatelli, arquitecto que se encargará del emplazamiento de estructuras para firmas como Atanor, Bayer y Ternium.
Proceso
Tal como sucede en distintos rubros, el mencionado evento agroindustrial representa una fecha resaltada en la agenda de los profesionales arquitectónicos. “Expoagro para nosotros es un evento importante en el calendario, ya desde fines del año pasado nos organizamos para ver cómo encararlo”, sostuvo Guatelli en diálogo con EL NORTE. “Siempre es un desafío, porque por más que los stands sean similares nunca son iguales y nos va poniendo a nosotros retos nuevos”, añadió el asociado de Artek, un estudio que trabaja en el predio nicoleño desde la primera edición de la muestra.
En esa misma línea, destacó las dificultades que conlleva las tareas a cielo abierto: “Más allá de las características de cada estructura y el vértigo que tiene trabajar contrarreloj a este evento se le suman las condiciones climáticas que te pueden jugar una mala pasada”. No obstante, el objetivo consumado trae sus réditos tanto económicos como emotivos. WEl volumen y tamaños de los stands los hace vistosos, por lo que también representa un apalancamiento publicitario para la firma”, refirió sobre el apartado comercial, pero sin dejar de lado los objetivos personales: “Cada vez que encaramos un proyecto de estos ponemos mucho de nosotros. Verlo terminado nos genera satisfacción porque sabemos todo lo que costo y el trabajo que conlleva. Cuando lo ves listo es una linda sensación”.
Valor local
Si bien es un evento de magnitud internacional, con la presencia de firmas abocadas a rubros variados, la importancia de la sociedad nicoleña no deja de pesar. “Para nosotros es importante un equipo en San Nicolás porque nos puede resolver cualquier imprevisto que surja. Es de gran ayuda el conocimiento de la zona y contactar gente del lugar”, aseguró Guatelli. “Nos viene dando muy buenos resultados, así que estamos contentos con esta política de integrar personas de la ciudad porque además vienen con gusto y trabajan de buena manera”, expresó.
En esta edición, el profesional mencionó el caso de Irene Gutiérrez una joven nicoleña que actualmente se encuentra cursando la licenciatura en arquitectura en la Universidad de Buenos Aires y que fue seleccionada para las tareas dentro del predio ferial: “El caso de Irene combina dos factores que nos vienen muy bien, primero por ser una estudiante de arquitectura haciendo sus primeras armas en el mundo laboral, algo que solemos buscar desde la empresa y además es de San Nicolás”.
Representando
A partir de hoy, Gutiérrez comenzará a dar sus primeros pasos en el ámbito profesional y plasmó sus expectativas en la previa. “Estoy muy entusiasmada de poder trabajar en la Expoagro en un área relacionada con lo que estoy estudiando y más siendo que es mi primer trabajo¸ manifestó la nicoleña en una entrevista con este medio.
“Espero que sea una experiencia que me de conocimientos en lo práctico y en un sector del cual no estoy familiarizada como lo es la agroindustria y que a la par me permita comenzar a introducirme en lo laboral”, sentenció Irene.