El Alzheimer, que representa entre el 60% y 70% de los casos de demencia, afecta a más de 44 millones de personas en el mundo.
Cada vez más expertos recomiendan controlar los factores de riesgo que predisponen al desarrollo de demencias desde edades tempranas, con intervenciones no farmacológicas enfocadas en la alimentación, el ejercicio y un estilo de vida saludable.
En Argentina, impacta a unas 300.000 personas, siendo la quinta causa de muerte. Aunque algunos factores de riesgo, como la edad o la genética, no son modificables, se han identificado 14 factores que sí lo son, como la hipertensión, la obesidad, el tabaquismo y el aislamiento social.
Mantener una vida saludable desde una edad temprana, incluyendo una dieta equilibrada y actividad física, puede reducir el riesgo de desarrollar Alzheimer.
Suplemento nutricional
En el marco de las intervenciones no farmacológicas, la incorporación de un suplemento nutricional que incluye omega 3, colina, uridin monofosfato, vitaminas del grupo B, C, E y selenio -que demostró científicamente mejorar las sinapsis (conexiones neuronales)- puede contribuir a prevenir o demorar la progresión de condiciones relacionadas con el deterioro cognitivo y las demencias.