Tanto gasoil como naftas faltan en las estaciones de servicio de la ciudad por irregularidades en el abastecimiento. Cuando los combustibles son repuestos, se forman largas filas de vehículos cuyos conductores buscan hacerse del producto para evitar quedarse con el tanque vacío en una próxima faltante. “Las petroleras no entregan, las estaciones de servicio están trabajando a un 40%”, planteó en “Primicia Nicoleña” (Radio U) Francisco Bonaventura, empresario del sector.
De la redacción de EL NORTE
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Desde hace semanas el desabastecimiento de combustibles se percibe en las estaciones de servicio de distintos puntos del país y San Nicolás no logra abstraerse. A razón de ello, el programa “Primicia Nicoleña” de Radio U se comunicó con Francisco Bonaventura, dueño de estaciones de servicio, quien dio luz al panorama actual.
En principio, aclaró: “No hay combustible y la gente piensa que lo estamos guardando o que no lo queremos vender por precio. Las petroleras no entregan, las estaciones de servicio están trabajando a un 40 % o directamente no tienen. Todos los días hay una cuadra de cola, no se si va a mejorar, no hay un buen pronóstico de lo que está pasando”.
Respecto al tiempo en que se repite esta escena, la fuente consultada aseveró que “viene de hace 15 o 20 días, se empezó a notar después de las PASO, y con el correr del tiempo empeoró, principalmente luego de las generales. En estos momentos el tiempo de espera para la carga llega a los 40 minutos, una hora, viene gente muy desesperada a llenar y todavía tienen combustible en el tanque”. A continuación, recomendó: “Si tenes combustible, no salgas desesperado a cargar porque no vale la pena. El desabastecimiento va a ser de uno o dos días máximo”.
Otro factor que complicó la situación de las firmas fue el congelamiento de precios para las naftas hasta finalizar octubre. El martes sería el último día de esta medida, y ante los rumores sobre un fuerte aumento para el próximo mes, Francisco afirma que no. y al tener “Fijado el precio generan desabastecimiento, falta de pago a empleados y en casos más extremos cierre de estaciones, suspensión de gente. Lo que se congela es el precio de la petrolera y no nos pueden aumentar a nosotros y así no podemos aumentarle al público”, expresó finalmente.
“Estamos totalmente desactualizados del precio. Si se hace un ajuste posiblemente rondará, de acuerdo a la inflación, en un 8% o 10%, no mucho más que eso. También dependerá como se mueve el dólar oficial después de las elecciones”, sostuvo y agregó: “Nosotros decimos que el combustible está barato en cuestión de precios y números, pero para el bolsillo de la gente está caro. Hoy llenar un tanque cuesta alrededor de dieciocho mil o veinte mil pesos”.
En cuanto a la situación general de todas las estaciones nicoleñas, el comerciante prefiere no generalizar. “Nosotros recibimos combustible y lo vendemos”, explica sobre su caso Bonaventura. “Se prevé que para este fin de semana habrá muy pocas estaciones de servicio que tengan combustible y abran al público. Especialmente por las personas que viajan”, aseguró.
A la consulta de la situación sobre las franquicias nicoleñas sostuvo que “las petroleras no tienen algún panorama”. En esta línea se refirió al presente de la firma estatal, la cual no respondió al decreto gubernamental: “YPF se está escudando incluso más que las privadas, las que están entregando más combustible que esta, ni siquiera ellos pudieron mantener el congelamiento de precios”.
Caos productivo
Desde Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), manifestaron su bronca ante esta situación. Exigieron respuestas urgentes por parte del Gobierno Nacional. En un comunicado expresaron, entre otras cosas, que “en un país que maneja su logística mayoritariamente por fletes en camión y con una matriz productiva netamente agropecuaria, la falta del insumo básico genera caos, ya sea en la siembra, la distribución, el abastecimiento de alimentos y la vida de todos los días”. Añadieron que esta situación está generando retrasos en el inicio de la nueva campaña y que “frente a la necesidad crece el abuso, aparecen los sobreprecios” y enfatizan que “se ven obligados a pagar precios más elevados en el mercado negro, lo que aumenta costos y reduce márgenes de ganancia”.
Finalmente, alertaron que “urge tomar medidas concretas, y hacemos un llamado a las autoridades para abordar esta crisis y tomar medidas concretas para garantizar el suministro de combustible”.
Confianza
Desde el gobierno sostuvieron que solo se trata de “un rumor”. Desde la Secretaría de Energía de la Nación aseguraron que no hay faltante, y dieron a conocer un nuevo récord de producción petrolera con 645,5 mil barriles totales en septiembre. Desde la cartera conducida por Flavia Royón explicaron que “hubo un pico de demanda el fin de semana producto de una psicosis (sic) fomentado por la prensa”. Ya desde hace semanas atrás, el 12 de octubre pasado, la secretaria Royón debió salir a aclarar que no había “un desabastecimiento generalizado”.
Aunque luego admitieron que “la reposición viene más lenta de lo normal” y un factor al que apuntan es el arranque de la siembra que genera un aumento de la demanda de parte del sector agropecuario. Y “confían en que el abastecimiento se normalizará”.
Pese a la “confianza” del Ministerio, la Sociedad Rural Argentina, publicó un relevamiento dónde se habla de la faltante de gasoil grado 2, establecimiento de cupos (de carga), dispersión de precios y acortamiento a 7 días el plazo de pago. Un mayor grado de desabastecimiento en zonas de frontera, donde la demanda es alta por los menores costes en Argentina en relación a los países vecinos”.