La Sociedad Rural de San Pedro rechazó la visita del gobernador Axel Kicillof, acusándolo de implementar políticas hostiles hacia el agro. El intendente Salazar cuestionó la representatividad de la entidad.
La Sociedad Rural de San Pedro ha declarado “persona no grata” al gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, en vísperas de su visita programada para mañana 20 de noviembre, con motivo de la conmemoración del Día de la Soberanía Nacional. La entidad emitió un comunicado en el que expresa su “profundo rechazo” a la presencia del mandatario provincial en la localidad. Argumentan que las políticas implementadas por Kicillof han demostrado un “claro desconocimiento y desprecio por el esfuerzo de los productores”, sector que consideran esencial para la economía y la vida comunitaria.
El malestar de la Sociedad Rural se centra en el incremento del Impuesto Inmobiliario Rural, que, según denuncian, ha superado ampliamente el 200% previsto para 2024, llegando en algunos casos al 500%. Además, señalan que la cuarta cuota de este tributo presentó un alza del 100% respecto a la anterior, afectando aproximadamente al 50% de las partidas. Estas medidas son interpretadas por la entidad como una postura hostil hacia el sector agropecuario, orientada a debilitar a quienes sostienen el desarrollo de la provincia con su trabajo y sacrificio.
La respuesta de Salazar
En respuesta, el intendente de San Pedro, Cecilio Salazar, emitió un comunicado en el que rechaza las declaraciones de la Sociedad Rural. Salazar sostiene que el campo sampedrino necesita “políticas inclusivas, no enfrentamientos poco representativos de la producción de San Pedro”. Además, acusa a la entidad de contribuir al “mensaje de violencia que quiere poner en agenda el Gobierno Nacional de Javier Milei”. El intendente también cuestiona la representatividad de la Sociedad Rural, afirmando que ya no refleja los intereses de la mayoría de los productores locales, quienes están más comprometidos con el trabajo diario y la producción, en articulación con diferentes ministerios provinciales.
Este intercambio de declaraciones refleja la tensión existente entre la administración provincial y ciertos sectores del agro bonaerense, en particular en relación con las políticas fiscales y su impacto en la producción rural.