Tras conocerse el dato de inflación proporcionado por el INDEC, EL NORTE recorrió varios supermercados locales para conocer cuánto habían registrado de aumento los productos alimenticios. Según los propios responsables, todos aumentaron entre un 15% y un 20% en el mes de enero.
De la Redacción de El Norte
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La inflación de enero fue de 20,6% y acumuló 254,2% durante el último año, según informó, en la corriente semana, el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). El dato mensual implicó una desaceleración respecto al 25,5% que había marcado diciembre, el más alto desde febrero de 1991, por el cual el 2023 había cerrado en 211,4 por ciento.
Según el informe del Indec, “la división de mayor aumento en el mes fue Bienes y servicios varios (44,4%), producto del incremento en artículos de Cuidado personal. Le siguieron Transporte (26,3%) –por las subas en transporte público y el arrastre del aumento de combustibles– y Comunicación (25,1%), por el alza en servicios telefónicos y de internet”.
“La división con mayor incidencia en todas las regiones fue Alimentos y bebidas no alcohólicas (20,4%). Al interior de la división se destacan las subas de Carnes y derivados y Pan y cereales. Las dos divisiones que registraron las menores variaciones en enero fueron Prendas de vestir y calzado (11,9%) y Educación (0,9%)”, agregó el informe.
EL NORTE recorrió varios supermercados locales, a fin de conocer cuánto habían aumentado los alimentos en nuestra ciudad. Los responsables de los mismos, coincidieron en que todos los productos aumentaron entre un 15% y un 20%. Dependiendo del producto, muchos otros bajaron, ya que en diciembre habían sufrido un incremento del 40%.
“Desde la victoria de Javier Milei, todos los meses vienen aumentos. El problema es que a veces la remarcación es muy grande porque a nosotros nos llegan por encima del 10%. En enero, absolutamente todos los productos llegaron con un 15% o un 20%, impactando de lleno en los precios de venta al público”, sostuvo un supermercadista local.
Entre los artículos que más se sintieron con esta última suba, fueron las latas, lácteos y gaseosas. “Hubo un problema muy grande en diciembre. Ahí hubo empresas que se atajaron suponiendo lo que iba a venir y subieron un 40% sus productos. Hoy ya está más estabilizado, pero todavía se nota que los precios son altos”, agregó la misma fuente consultada.
Es que ese incremento pegó muy fuerte en todos los supermercados. No fueron la excepción las grandes cadenas, pero siempre los más afectados terminando siendo los considerados chicos o de barrio.
Otro dueño, también consultado por este diario, manifestó que “hemos tenido siempre una gran diferencia en determinados productos muy consumidos y conocidos, porque prefieren darles ofertas a las grandes cadenas por la cantidad de ventas. Cuando nosotros aumentamos, tememos siempre perder algún cliente que prefiere definir sus compras en comercios de mayor envergadura”.
Hay casos muy puntuales. Esta semana, hubo listas de precios actualizados que trajeron productos con ofertas, a fin de darle rotación en góndola. No obstante, son escasos y hasta considerados no básicos.
Bajas ventas
La disparada de precios concluyó en la baja de ventas. “Mira cómo está el supermercado hoy, no hay nadie. Esto es lisa y llanamente por los aumentos. Que obvio, no somos solo nosotros, pero nos afecta mucho. Nuestros clientes fijos vienen menos que antes, llevan pocos productos; la crisis que se vive te empuja a eso”, manifestó.
Por otro lado, también manifestaron preocupación por la alta utilización de billeteras digitales para obtener descuentos en distintos comercios. Tal como publicara EL NORTE en ediciones pasadas, las carnicerías y pollerías se llenan los fines de semana que hay un reintegro del 35% con Cuenta DNI.
“A nosotros nos afectó mucho el tema de los descuentos en carnicerías. De hecho, optamos por sacar la venta de carne que teníamos acá porque era inviable sostenerla. Había un sueldo más que pagar, el producto y la limpieza de las máquinas. Desde ya, es entendible que la gente prefiera comprar donde hay descuento, pero nosotros no podemos adherirnos ya que tenemos otras promociones”, aseguró uno de los supermercadistas consultados.
“Son cuestiones que terminan afectando al comercio. Esperamos que pronto la situación del país y el poder adquisitivo de la gente mejoren. Nos duele a veces saber que estamos remarcando precios, incluso hasta dos veces en el mes. Es difícil, nos cuesta a todos y nos preocupa la continuidad de muchas aristas fundamentales”, agregó.