El presidente del bloque de la Coalición Cívica-ARI en la Cámara de Diputados, Juan Manuel López, reconoció que “el Congreso va a estar trabado por un tiempo” y afirmó que “cuando el oficialismo decide la agenda no puede no esperar que si no la acuerda con la oposición haya una reacción”.
“Va a estar trabado por un tiempo el Congreso. Espero que se destrabe. Ojalá el Congreso pueda funcionar en el último año del Gobierno del Frente de Todos con cierta normalidad”, sostuvo el vicepresidente de la Comisión de Juicio Político de la Cámara baja.
En declaraciones radiales, el dirigente de Juntos por el Cambio señaló que “cuando el oficialismo decide la agenda no puede no esperar que si no la acuerda con la oposición haya una reacción, que en este caso es trabar algunas leyes, que no van a solucionar la vida de los argentinos”. De todos modos, el abogado aclaró que “no se puede poner de rehén a la población en una pelea de poder”.
“Hay que acostumbrarse a que va a haber gobiernos con parlamentos repartidos. Estábamos acostumbrados a que había oficialismos con mayoría en dos cámaras”, añadió.
Al referirse al pedido de juicio político a los miembros de la Corte Suprema, López indicó que “se da en un contexto de una cantidad de proyectos para dominar al Poder Judicial” y consideró que “los números en el Congreso no están para destituir, pero sí para desgastar, para desprestigiar”.
“Nos parece una iniciativa peligrosa, que desgasta mucho a las instituciones y a la política, que va a estar discutiendo un problema del poder y no los problemas de la sociedad”, manifestó el dirigente opositor.
En otro tramo de la nota sostuvo que los chats entre funcionarios judiciales y dirigentes del PRO “fueron la excusa” para impulsar el pedido de juicio político. “Si hay que dar ese debate, habría que haberlo dado en otro clima, no en medio de un fallo que no le gusta al oficialismo”, planteó López en alusión a la decisión del máximo tribunal sobre los fondos de coparticipación que reclama la Ciudad de Buenos Aires.
Al ser consultado sobre la actual conformación del máximo tribunal, López consideró que “es una Corte independiente”, aunque definió al juez Ricardo Lorenzetti como “un equilibrista del poder”. En tanto, manifestó que los magistrados Juan Carlos Maqueda, Horacio Rosatti y Carlos Rosenkrantz “se han sabido separar de la política partidaria”.