El presidente Javier Milei reformó la estructura en el Ministerio de Justicia y terminó de licuar organismos del exMinisterio de Mujeres. El Gobierno había recomendado el uso del contacto telefónico nacional tras la denuncia de Fabiola Yañez, que continuará funcionando pero con menos jerarquía.
De la Redacción de EL NORTE
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El presidente Javier Milei reformó la Dirección Nacional de la Línea 144 y otras áreas de asistencia y prevención contra la violencia a las mujeres y por razones de género, tras una profunda reestructuración de las áreas que dependen del ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona. La línea de atención telefónica y vía redes sociales continuará funcionando, pero perdió jerarquía administrativa y funcional con el Decreto 735/2024, publicado el viernes en el Boletín Oficial. Quedará bajo la órbita de una única jefatura: la Dirección de Fortalecimiento para el acompañamiento a las víctimas.
La medida se suma al fuerte achique de personal de operadoras de la Línea 144, que disminuyó su capacidad de atención tras el ajuste del gasto público que se llevó a cabo en el Estado desde diciembre del año pasado. Una de las áreas que perdió más recursos humanos y económicos fueron las políticas y programas que dependían el exministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad (MMGyD), donde se despidió a cerca del 80% de las empleadas.
AUMENTO DE CONSULTAS
El Gobierno recomendó el uso de la Línea 144 a las mujeres víctimas que padecen violencias, en medio del escándalo por la denuncia de Fabiola Yañez contra Alberto Fernández. En los últimos días hubo un fuerte aumento de consultas. Pasó lo mismo con el caso de Thelma Fardin cuando acusó al actor Juan Darthés por abuso sexual.
Desde hoy, este canal de comunicación bajará dos escalones en la importancia dentro de la pirámide del Estado. Las operadoras reportarán directamente a la “Coordinación de Atención Inmediata”, una estructura de menor jerarquía que una dirección nacional. Además, la misma dirección nacional tendrá a su cargo la Línea 137, de atención telefónica para personas víctimas de violencia sexual, grooming y familiar; y la Línea 149, creada con el fin de asistir a personas víctimas de delitos y sus grupos familiares con la Ley N° 27.372.
DESMANTELAMIENTO Y DEROGACIÓN
El gobierno nacional sostiene que los delitos vinculados a razones de género no merecen una especial atención, a contramano de las protestas de los últimos años que visibilizaron los casos de femicidio, como las marchas del “Ni Una Menos”. Los libertarios también niegan que exista alguna desigualdad de género entre hombres y mujeres, y que se deba destinar una especial atención a las minorías sexuales.
Desde ese paradigma político, se avanzó primero con el desmantelamiento del exMinisterio de Mujeres, luego con la Subsecretaría de Protección contra la Violencia de Género, y finalmente con la eliminación del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI). Esta semana Milei los definió a ambos como órganos “siniestros que se utilizaban para perseguir ideológicamente”.
De acuerdo a un informe de Infobae sobre este tema, el último decreto es un paso más que licúa la estructura formal de algunos de los “ravioles” de la administración de estos dos organismos. Si bien muchas de las áreas ya estaban sin personal o virtualmente paralizadas, se eliminaron más de 60 de dependencias, junto a la fusión y creación de otras.
Algunas de las direcciones que derogaron son la de Asistencia Integral a las Víctimas de Violencia por Razones de Género; de Articulación Territorial para la Asistencia y Atención a las Víctimas; de Refugios y Hogares de Protección Integral, de Abordaje Integral de Casos de Femicidios, Travesticidios, Transfemicidios y Delitos contra la Integridad Sexual, entre muchas otras.
Según el Equipo Latinoamericano de Justicia y Género (ELA), en lo que va del año “se ejecutó un 28% menos de presupuesto de la Línea 144, en comparación con el 1er semestre de 2023″. Y en junio se despidió al 38% de las personas que trabajaban en ese canal de comunicación. En paralelo, está en plena desarticulación el Programa Acompañar, que era una ayuda económica para mujeres que la necesitan para poder salir de un vínculo violento con exparejas y solo se ejecutó el 82% del presupuesto.