El Gobierno aplicó cambios al Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones y creó una “sucursal dedicada” para garantizar que los recursos se utilicen de manera adecuada y eficiente.
El Gobierno modificó vía decreto las reglas para el Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI). En particular, se dirige a las empresas que desean ampliar proyectos existentes, pero que no se habían adherido inicialmente al esquema que busca atraer inversiones al país.
Cabe recordar que este esquema promocional está diseñado para estimular grandes inversiones en el país, proporcionando incentivos económicos, estabilidad jurídica y un sistema eficiente para proteger derechos adquiridos a aquellos proyectos que cumplan con los requisitos establecidos.
En ese marco, el decreto 1028/2024 publicado este viernes en el Boletín Oficial modificó el artículo 60 del reglamento. Fue sustituido para precisar las condiciones bajo las cuales una ampliación de un proyecto preexistente puede beneficiarse del RIGI.
Según menciona el texto oficial, el objetivo de estas modificaciones es “fomentar nuevas inversiones mediante un marco claro y transparente”, evitando conflictos entre proyectos originales y ampliaciones. Esto asegura que los incentivos se destinen exclusivamente a desarrollos que amplíen la capacidad productiva y cumplan con los lineamientos del RIGI.
El decreto busca además fortalecer la confianza de los inversores al establecer reglas precisas y mecanismos de resolución de disputas que garantizan la seguridad jurídica en las inversiones realizadas bajo este régimen. El cambio entra en vigencia a partir de su publicación en el Boletín Oficial.