La administración de Javier Milei anunció la desregulación del servicio de correo postal, con el objetivo de aumentar la competencia y mejorar la digitalización y seguridad. La medida afecta a Correo Argentino, que atraviesa un proceso de reestructuración para reducir costos y expandir su alcance mediante puntos de atención en comercios.
El Gobierno anunció la desregulación total del servicio de correo postal en Argentina, medida que, según el portavoz gubernamental Manuel Adorni, busca “más competencia, mayor digitalización y mejor seguridad en materia postal”. Adorni, funcionario de la administración de Javier Milei, comunicó la decisión esta noche y afirmó: “Dios bendiga a la República Argentina”.
La desregulación del servicio de correos se enmarca en el proceso de liberalización que el Gobierno de Milei está impulsando en varios sectores de la administración pública y empresas relacionadas con el Estado. Esta estrategia, encabezada por el ministro Federico Sturzenegger, incluye a Correo Argentino, una de las empresas estatales que inicialmente se excluyó de la lista de privatizaciones aprobadas en la Ley Bases, junto a Aerolíneas Argentinas y Radio y Televisión Argentina.
El plan de reestructuración del Correo contempla la eliminación de muchas sucursales tradicionales para reemplazarlas por puntos de atención en librerías, almacenes, estaciones de servicio y otros comercios, permitiendo un mayor alcance geográfico. Actualmente, Correo Argentino cuenta con 1.452 sucursales y 3.675 unidades postales, y emplea a aproximadamente 13.600 personas. Sin embargo, en los últimos 15 años, el envío de cartas ha disminuido un 80%, siendo ahora su principal actividad el transporte de paquetes de comercio electrónico.
En línea con esta desregulación, Correo Argentino atraviesa un proceso de saneamiento financiero. Según su presidente, Camilo Baldini, quien conversó en junio pasado con Infobae, la empresa busca reducir su déficit de $100.000 millones registrado el año pasado, aspirando a un equilibrio financiero hacia fines de este año. “El Correo pasa por un proceso de modernización que va a beneficiar al ciudadano común porque va a dejar de costarle plata como contribuyente”, explicó Baldini. Asimismo, detalló que el déficit de la compañía, que en abril de 2023 representaba el 55% de su facturación, se redujo al 20% un año después.