Las cuentas públicas registraron en agosto un déficit primario de $ 224.708 millones, en línea con la meta anual establecida, según informó el Ministerio de Economía.
Al presentar las cifras el Palacio de Hacienda afirmó que “el crecimiento real acumulado del gasto primario se desaceleró por cuarto mes consecutivo, en el marco de un proceso de ordenamiento fiscal y cuidado de las cuentas públicas”.
El 50% del desequilibrio se explica por los subsidios a la energía y al transporte, lo cual argumenta la decisión del gobierno nacional de avanzar en el recorte de la ayuda estatal para ajustar el balance al acuerdo con el FMI.
Si se suma el pago de los intereses de la deuda (resultado financiero) por $ 160.053 millones (suba interanual de 133%) el déficit total del Estado nacional ascendió a $ 370.104 millones.
Sobre los $ 224.708 millones de déficit primario, $ 87.901 millones fueron destinados a subsidios energéticos y $ 24.937 millones se orientaron a la ayuda al transporte.
Ambos incentivos serán parcialmente removidos desde septiembre y de allí se espera una reducción del desequilibrio fiscal.
De esta manera, entre enero y agosto el déficit primario acumulado ascendió a $1.101.336,7 millones, mientras que el déficit financiero fue de $1.880.047 millones.
Los ingresos de agosto subieron 73,7%, mientras que los gastos primarios avanzaron 72,9%
El Gobierno se comprometió a cumplir con la meta de déficit fiscal de 2,5% acordada con el FMI y recientemente ratificada junto a la aprobación de las metas del segundo trimestre que derivan en un giro de US$ 3.900 millones.
Economía aclaró que el déficit de $ 224.707 millones, se alcanzó sin computar los ingresos provenientes de las rentas de la propiedad vinculadas a la emisión primaria de títulos públicos por $ 160.052,6 millones. Si se computaran, el rojo descendería a $ 210.051,8 millones.